Las bacterias y los virus son microbios, microorganismos unicelulares que miden entre 0,5 y 5 micrómetros, y para verlas es necesario utilizar un microscopio.
Las bacterias tienen la capacidad de sobrevivir y multiplicarse por sí mismas en cualquier lugar. En el aire, agua, en cualquier superficie o dentro del cuerpo humano.
Existen muchas enfermedades producidas por bacterias, siendo algunas muy graves como la meningitis, aunque afortunadamente la mayoría de las infecciones por bacterias pueden ser eliminadas por los antibióticos, contribuyendo así a la salud de la población e incluso a salvar vidas.
Las bacterias son responsables de enfermedades comunes como resfriados, gripe, neumonía, cólera, sífilis lepra, tifus o tuberculosis, y pueden provocar una infección en heridas o inflamación e irritación de garganta y oído.
A continuación se indican algunas enfermedades provocadas por bacterias.
Impétigo: causado por la bacteria Staphylococcus pyogenes los, es muy común en los niños. Se caracteriza por la aparición de úlceras cutáneas que se rompen y causan una cáscara. El impétigo es una enfermedad contagiosa.
Botulismo: la bacteria que causa esta enfermedad se llama Clostridium botulinum y produce una toxina que puede contaminar ciertos alimentos (en especial la comida enlatada, conservas y embebidos, como las salchichas). El botulismo no es contagioso, pero puede causar la muerte si no se trata rápidamente. El botulismo es causado por la ingestión de la toxina producida por las bacterias presentes en los alimentos.
Lepra: también llamada enfermedad de Hansen. Esta enfermedad es causada por la bacteria Mycobacterium leprae. Causa daño a los nervios, la piel y las membranas mucosas. La persona que tiene esta enfermedad pierde la sensibilidad en la piel. La lepra es una enfermedad contagiosa, pero existe una vacuna para las personas que tienen contacto directo con el paciente.
Meningitis meningocócica: esta enfermedad también es causada por virus. Se trata de una infección provocada por la bacteria Neisseria que afecta a las membranas que rodean el cerebro conocidas como las meninges. La meningitis provoca fiebre alta, náuseas, vómitos y rigidez de los músculos del cuello. Se trata de una enfermedad contagiosa que tiene vacuna para su prevención.
Tétanos: es una enfermedad causada por la bacteria Clostridium tetani, que puede entrar al cuerpo a través de heridas profundas en la piel. La persona siente dolor de cabeza, fiebre y contracciones musculares. El tétanos no es contagioso y no existe una vacuna para la prevención.
FIEBRE TIFOIDEA: es una enfermedad infecciosa producida por Salmonella typhi (bacilo de Eberth), o Salmonella paratyphi A, B o C. Su reservorio es el hombre, y el mecanismo de contagio es fecal-oral, a través de agua y de alimentos contaminados con deyecciones.
Tos ferina: causada por la bacteria Bordetella pertussis, es común en los niños. Sus síntomas se asemejan a los de un resfriado, seguida de una tos fuerte. Se trata de una enfermedad contagiosa, pero no existe una vacuna para la prevención. Los síntomas de la tos ferina se asemejan a los síntomas de un resfriado común.
Neumonía bacteriana: una enfermedad causada por la bacteria Streptococcus pneumoniae. La persona enferma siente fiebre, dificultad para respirar y dolor en el pecho. Esta enfermedad es contagiosa, pero existe una vacuna para la prevención.
Tuberculosis: la bacteria responsable de causar esta enfermedad es Mycobacterium tuberculosis, que afecta a los pulmones. La persona enferma presenta tos, fiebre, fatiga y pérdida de peso. Se trata de una enfermedad contagiosa, pero que tiene vacuna para su prevención.
Cólera: enfermedad causada por la bacteria Vibrio cholerae, que se multiplica en el intestino, causando la liberación de agua y sales minerales. Esta enfermedad se adquiere a través de alimentos y agua contaminados. La persona infectada sufre de vómitos y diarrea. No es una enfermedad contagiosa.
PESTE BUBÓNICA: es producida por la bacteria Yersinia pestis que infecta los pulmones.
Leptospirosis: una enfermedad común en animales domésticos, es causada por las bacteria Leptospira interrogans. Se transmite a los humanos por contacto con agua, alimentos u objetos contaminados por la orina de animales infectados, especialmente las ratas.
SIFILIS: es producida por la bacteria espiroqueta Treponema pallidum a través de relaciones sexuales.