Seguramente te habrás topado alguna vez con la mención del ghee en recetas de la cocina hindú o en alguna terapia de masaje, pero sin comprender con exactitud a qué hace referencia este término.
En esta ocasión conoceremos un poco más de cerca este alimento, que tras más de 2000 años de uso se ha constituido en un ingrediente muy popular dentro del sistema ayurvédico, tanto para la gastronomía, la medicina, como para el snehana o masaje ayurvédico.
¿Qué es el ghee?
El ghee es un tipo de mantequilla, la cual se somete a un proceso que elimina su contenido proteínico y casi todas sus grasas, de ahí que también se la conozca como una mantequilla clarificada, de una consistencia mucho más suave y líquida que otras mantequillas, además de ser mucho más saludable, lo que ha permitido convertirlo en un excelente sustituto de la margarina y otros tipos de mantequillas.
Beneficios del ghee para el cuidado de la piel
Aplicado tópicamente, el ghee resulta un buen hidratante y humectante para la piel, así como un tratamiento aconsejable para tratar quemaduras y reducir los efectos de la vejez, debido a su contenido en antioxidantes.
Propiedades del ghee para la salud
En primer lugar, al ser libre de lactosa el ghee resulta un alimento indicado para las personas que padecen intolerancia hacia ese azúcar de la leche, por lo que perfectamente puede utilizarse en sustitución de la mantequilla y de ciertos tipos de queso.
Así mismo, resulta un alimento muy digerible y beneficioso para la digestión, facilita la retención de vitaminas y minerales de cada alimento que consumimos, a la vez que su alto contenido en aminoácidos hace del ghee un buen alimento para prevenir el cáncer y combatir el efecto oxidativo de los radicales libres, así como los del envejecimiento.
Pero debe tenerse mucha precaución en caso de tener colesterol alto, ya que esta condición sumada a las grasas saturadas que integran el ghee pueden dar como resultado problemas cardiacos.
Un uso muy habitual de este tipo de mantequilla es para mejorar la vista, bastando con aplicarse tópicamente un poco de ghee sobre los lagrimales para agudizar la visión y tratar problemas de ardor o vista cansada.
En cuanto a sus efectos negativos, a parte de los posibles problemas cardíacos en caso de poseer niveles altos de colesterol, el principal inconveniente que puede presentar con el consumo excesivo de esta mantequilla es el del incremento de peso, pero a excepción de estos cuadros, el ghee resulta un alimento adecuado para los tres tipos de dosha.