El centro de gravedad es la parte del cuerpo que nos permite mantener el equilibrio al movilizarnos. Abarca a las caderas, los músculos abdominales y la espalda baja. Pero el centro de gravedad también hace referencia al punto a cuyo alrededor se distribuye el peso, el cual suele ser la parte inferior del abdomen en la mayoría de las personas.
Pero el centro de gravedad puede verse alterado por diversos motivos, como el sobrepeso, por lo que, de no mejorar el centro gravedad, se puede sufrir desequilibrios y dolores musculares. Para evitar esto, aquí te proponemos una serie de ejercicios para fortalecer el centro de gravedad y equilibrio.
Músculos de la estabilización
Los músculos son elementos muy importantes para mantener el equilibrio, especialmente cuando se está en movimiento. Existen músculos que permiten permanecer estable y equilibrado en una determinada posición, como también hay músculos cuya función es respaldar dicho movimiento.
Por ello, ejercitar y fortalecer nuestros músculos es una buena forma de reforzar nuestro centro de gravedad y mejorar el equilibrio. La actividad física debe fortalecer especialmente los músculos de la cadera y la espalda, estabilizando la pelvis y la columna vertebral.
Un buena forma de lograr esto es acostarnos en una colchoneta boca abajo, sujetando las manos por detrás y levantando lentamente la parte alta del cuerpo. No debes hacer fuerza con la cabeza, sino con la parte baja de la espalda y con lentitud. Realiza algunas repeticiones. Este ejercicio
Otro buen ejercicio para la espalda, es colocarse acostado boca abajo, y apoyar el peso del cuerpo en las puntas de los pies, las palmas de la mano y los antebrazos, y hacer fuerza hacia abajo por unos segundos.
Hay formas más complicadas y que llevan mucho más tiempo de práctica. Por ejemplo, rotando las piernas, mientras el tronco se mantiene recto y concentrando el peso en los brazos. Así se fortalece la parte baja de la espalda y el abdómen, pero no es un ejercicio para aficionados.
Equilibrio en un solo pie
Mantén los brazos a los lados, a la altura de los hombros, y levanta un pie dejando que el equilibro se concentre en la otra pierna. En este ejercicio el centro de gravedad buscará reforzar el único punto de apoyo, mejorar la estabilidad y fortalecer los músculos.
Debes sostenerte en esta posición el mayor tiempo posible. Cuando debas bajar el otro pie a tierra, descansa por un momento y vuelve a intentarlo. Ve turnando este ejercicio para cada pierna y busca permanecer en equilibrio, sin tambalearte, el mayor tiempo posible.
Sentado, parado
Este ejercicio para mejorar el equilibrio es sumamente sencillo, por lo que podrías llegar a pensar que debe ser poco efectivo. Pero no es así; verás que practicándolo cotidianamente, tu equilibrio mejorará paulatinamente, y así poder pasar a ejercicios más complicados.
En este caso simplemente se trata de una rutina en la que partiendo de la posición de sentado, debes pararte moderadamente rápido y sin trabajo. Hazlo primero con los ojos abiertos, y luego con los ojos cerrados. También puedes realizar sentadillas, que además te ayudarán a tonificar las piernas.
Todos pueden considerarse como ejercicios de balance muy simples, que lo puedes hacer en tu casa en apenas unos minutos. Sólo debes tener constancia y ganas de mejorar tu salud. Pero también debes considerar otras posibilidades, como el tai chi o el yoga y sus beneficios para mejorar el centro de gravedad y el equilibrio.