La donación de óvulos es un proceso que permite que algunas parejas que tiene problemas para tener hijos, puedan concebirlos. También conlleva ciertas ventajas para la donante, como una compensación económica, ya que es un proceso largo y puede resultar incómodo. te contamos cómo funciona la donación de óvulos.
¿Quién puede ser donante de óvulos?
Para poder ser donante de óvulos, hay que cumplir determinados requisitos:
- Tener entre 18 y 35 años
- Tener una función ovulatoria normal
- No padecer malformaciones ni enfermedades genéticas o congénitas, ni tampoco hereditarias (los familiares próximos no pueden padecer estas enfermedades)
- La donante no puede ser adoptada, ya que es imprescindible conocer el historial médico de sus familiares cercanos
- Estar sana física y mentalmente
- No haber dado a luz más de 6 hijos
- Se considerará positivamente que la donante ya haya sido madre con anterioridad
El proceso puede durar un mes o algo menos, y durante el mismo, se estimula el ciclo ovárico de la donante para que produzca más óvulos (de 6 a 10), mediante una inyección subcutánea de hormonas. Al final del proceso, deben extraerse los óvulos, lo que requiere anestesiar a la donante. Dicha intervención dura unos 20 minutos, tras los cuales la paciente podrá hacer su vida normal.
La donación no es dolorosa, aunque sí puede causar pequeñas molestias, como hinchazón o dolor abdominal. No conlleva ningún problema de fertilidad para la donante.
La probabilidad de éxito de este proceso, oscila entre el 40 y el 60 %.
Tanto la donante como la receptora tienen derecho a la privacidad de sus datos, aunque la receptora puede conocer algunas características físicas de la donante, como raza, altura, color de ojos…
A continuación puedes ver un vídeo muy interesante en el que una donante de óvulos cuenta su experiencia durante el tratamiento.