En varias ocasiones hemos visto como la alimentación es un factor determinante a la hora de recuperarnos de muchas enfermedades o combatir distintas condiciones. Por eso, hoy queremos comentarte el tipo de dieta que deberías seguir en caso de que tengas una hernia de hiato.
Primero que nada comenzamos explicando exactamente qué es esto, se trata de un problema en que la parte superior del estómago se desplaza a través del hiato esofágico diafragmático hacia la cavidad torácica. Podemos decir que existen dos tipos, por un lado esta la hernia de hiato por deslizamiento, esta es la más común, sucede cuando la unión gastroesofágica se mueve por encima del diafragma conjuntamente con una porción del estómago. Por otro lado está la hernia de hiato paraesofágica, en este caso parte del estómago se va herniando a través del hiato diafragmático sin que se presente movimiento de la unión gastroesofágica.
Para poder combatir este problema hay algunas pautas alimenticias que haremos bien en tener en cuenta, por ejemplo, algo impórtate es, después de comer, no adoptar una posición horizontal, ya que propiciaría el relujo. Si quieres recostarte recomendamos que el cabezal este incorporado unos 30º. Además, es importante que evites algunos alimentos, tales como el café, té, bebidas alcohólicas, cítricos, chocolates y salados, fritos, guisos, salvo los muy sencillos.
Por otro lado, debes limitar la ingestión de alimentos grasos, evitando en lo posible los embutidos, yema de huevo, leche, queso, manteca de cerdo, frutos secos grasos, pasteles en general. Los alimentos flatulentos deberán suprimirse y en caso de que se la persona sea obesa entonces se recomienda comenzar una dieta, ya que la obesidad favorece el reflujo.
Estos eran algunos de los consejos que teníamos para compartir, aunque, no son los únicos, no te pierdas la próxima nota en donde te damos algunos más, ¡te serán muy útiles!
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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