Más que una dieta, la Dieta Macrobiótica es todo un estilo de vida, que armoniza tu cuerpo y tu mente, que es respetuosa con la naturaleza y que pone a todo tu organismo en equilibrio. Es la dieta macrobiótica, una de las preferidas por las celebrities y una de las más saludables del mundo.En la dieta macrobiótica lo que se busca es el equilibrio en el organismo, entre el cuerpo y la mente, entre el yin y el yang. Y la comida nos puede ayudar.Los orígenes de la dieta macrobiótica.Este tipo de alimentación nació en Oriente, y llegó a Europa en los años 30 a través de Japón. Está muy vinculada al yoga, a la evolución personal y al orden del universo dado que el yin y el yang entran en juego.Según los expertos, el organismo está compuesto por cinco partes de yin (vinculado a, sodio) y una de yang (vinculado al potasio) de ahí que debamos consumir los alimentos en esta proporción. Y es que en la macrobiótica se sostiene la teoría de que los alimentos llegan hasta cada célula de nuestro cuerpo, y si no hay este equilibrio se producen enfermedades y desequilibrios.¿Qué alimentos se pueden comer?Antes de nada, debemos saber que no se trata de una dieta vegetariana, sino que se pueden consumir productos de origen animal. Las carnes magras, pescado sin piel o pollo son perfectamente aceptados.Eso sí, los alimentos más equilibrados según la filosofía macrobiótica son loscerealesintegrales. Y, por lo tanto, son la base de esta dieta. ¿Por qué integrales? Porque al refinarlos pierden propiedades y ganan tóxicos. Entre estoscerealescaben el arroz, la cebada, el maíz o el trigo, preparados en todas las versiones que se nos ocurran: hervidos, crudos, en sopa, mezclados con vegetales…Los que sí se suprimen son todos aquellos alimentos nocivos como las grasas saturadas, el azúcar y la sal en abundancia o el alcohol.Dentro de la dieta macrobiótica están los alimentos específicos, que tienen propiedades medicinales sobre el organismo y que son imprescindibles. Son las algas, la soja o los tés y, como vemos, tienen origen japonés.Alimentos yin y yanLa alimentación macrobiótica distingue entre alimentos yin y yang. Los yin proporcionan energía calmante y debilitante, mientras que los yang son energizantes.– Los alimentos con predominio de yin son las frutas, las verduras de hoja verde, las semillas, el tofu, los zumos de frutas o la mermelada sin azúcar.
– Los que tienen exceso de yin son el azúcar, los dulces, los pasteles, las especias, el alcohol y el café.– En cuanto al yang, tienen predominio loscerealesintegrales y todos sus derivados, las verduras de raíz, el pescado y el marisco, el queso fresco, las legumbres o la sal sin refinar.– El exceso de yan lo encontramos en la carne, las aves, los quesos duros y los huevos.Algunos puntos negativos de la alimentación macrobiótica – Quienes la siguen en su versión más estricta, deben reducir al mínimo la ingesta de líquidos- Si sólo consumimos cereales, tenderemos desequilibrios alimenticios y nos faltarán proteínas, hierro y calcio.- Se deben eliminar algunos alimentos yin, de energía debilitante, como las patatas, las berenjenas o los tomates.A favor de la dieta macrobiótica.La versión equilibrada, que implica comer todos los grupos alimenticios, está llena de beneficios, incluso para el medio ambiente. En este aspecto es muy destacable que se aboga por el consumo de alimentos de origen biológico y decultivolocal. Es decir, que nada de abonos químicos ni contaminantes en el transporte.Además, se eliminan los alimentos refinados y de origen industrial. A cambio, se recomienda consumir las verduras de cada estación para evitar los vegetales de invernadero o modificados genéticamente.¿Cómo sería un menú equilibrado de alimentación macrobiótica?Lo ideal sería que cada día consumiéramos un 50% de cereales, un 25% de verduras, un 10% de legumbres y un 5% a repartir entre fruta, sopas y mariscos. Como ves, ¡las posibilidades de una dieta macrobiótica sana son infinitas!
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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