Aunque para muchos, y me declaro culpable, la cena es uno de los momentos en que nos atiborramos de alimentos, la verdad es que debería ser una de las comidas más moderadas del día, si queremos mantener una dieta saludable.
Pero, teniendo en cuenta que ya casi es una característica cultural de la humanidad el hecho de tomar la noche y la hora de cenar como el mejor momento para celebrar un banquete, hoy compartiré contigo algunos consejos para revertir estas prácticas y así tener una cena saludable y perfecta.
¿Por qué comemos más durante la cena?
Si bien es cierto que mucha gente ya ha perdido la costumbre de cenar, y apenas consume algún snack o comida chatarra, otros hemos elegido este momento para tener la principal comida del día, y no sin aplicar un criterio bastante coherente, pero poco saludable.
Sólo piensa que desde que te levantas a la mañana sabes que luego de cada comida tienes cientos de cosas y compromisos por hacer, ya sea luego del desayuno, almuerzo o de la casi extinta merienda, por lo que simplemente no puedes darte el lujo de disfrutar de una buena mesa.
Por el contrario, cuando llegamos a casa a final del día, aparte de alguna tarea doméstica en el mejor de los casos, sólo nos queda descansar, por lo que a muchos nos resulta el momento indicado para darnos los gustos culinarios que no pudimos durante el día.
Consecuencias de una cena abundante
Pero, por supuesto, no respetar el refrán de “cenar como un mendigo” trae sus consecuencias. En primer lugar, estás sobrecargando de alimentos a tu organismo que no necesita en ese momento en que la actividad corporal ha disminuido notoriamente. Además de que lo obligas a digerir todos esos nutrientes en un horario en que debería estar descasando o realizando otras tareas, por lo que las cenas abundantes suelen ser una de las principales causas de las indigestiones.
Cómo lograr una cena saludable
El lograr una cena saludable, sin que con ello se restrinja el buen apetito con que mucha gente llega a esta hora, es uno de los principales desafíos a la hora de confeccionar la cena perfecta. Pero para que tengas una mejor idea, aquí te dejo unos puntos que tendrás que tener en cuenta para cenar sano:
Horario
Es conveniente que la hora de cenar se establezca con suficiente distancia del momento de acostarse, para dar oportunidad a que se realice una adecuada digestión y así evitar acostarnos con el estómago sobrecargado.
Comer relajado
Ahora que hemos llegado al final del día, nada nos impide tomarnos unos minutos más para disfrutar de los alimentos. Esto permitirá que la cena nos caiga mejor y nos resulten más beneficiosos sus aportes nutricionales.
¿Qué debe haber en una cena perfecta?
Y obviamente, los alimentos que consumamos durante la cena son los principales condicionantes de su calidad, por lo que tendremos que optar por alimentos saludables y fáciles de digerir.
Tienes cientos de opciones entre las que elegir para preparar una cena saludable: cereales, frutas y verduras, productos lácteos, huevos, carnes magras o pescado. Únicamente, evita los productos muy procesados y los que sabes muy bien que no son saludables.
Sigue estos consejos y seguramente podrás disfrutar de una cena perfecta y saludable, que permita cerrar tu día con broche de oro.