Desde los tiempos más remotos, el té ha sido consumido por su sabor y por la tonificación que brinda al cuerpo. Desde hace años ese consumo se ha visto incrementado por otras causas que atañen más directamente a los beneficios del té negro en la salud de las personas, todo ello influenciado por el gran aumento en el consumo de bebidas gasificadas, que alteran el metabolismo celular y reducen los niveles de minerales tan necesarios como el calcio y el magnesio.
Por el contrario, el té es un excelente aliado a la hora de prevenir alteraciones metabólicas y de forma totalmente natural y amigable para con el organismo. En este sentido, recientes investigaciones conjuntas realizadas por científicos de Escocia y Estados Unidos han demostrado los grandes y singulares aportes que un determinado consumo diario de té negro puede hacer a la salud humana, especialmente relacionados con la prevención de las enfermedades cardiacas.
En efecto, se demostró que el consumo de tres tazas de té al día es capaz de reducir los niveles de triglicéridos en la sangre en un 36%, mientras que en el caso del colesterol LDL al HDL, la reducción sería de un 17%, mejorando y rehabilitando todo el sistema cardiovascular.
Beneficios del té negro
Mejora los niveles de riesgo de enfermedades cardiovasculares y las defensas antioxidantes del plasma en la sangre.
Reduce los niveles de grasas y azúcar a la sangre, siendo estos los principales factores de riesgo para que se produzcan las afecciones cardiacas.
Su elevado contenido en antioxidantes colabora a reducir el riesgo de enfermedades cardiacas, el cáncer y trastornos mentales.
Funciona como un óptimo antioxidante del tracto digestivo y otros tejidos orgánicos, protegiendo las células del organismo al eliminar radicales libres gracias a su alto nivel de polifenoles.
La investigación también destaca la utilidad de esta bebida no solo por los beneficios para la salud del té que ya te hemos comentado, sino que también por lo fácil y accesible que resulta este tratamiento natural, consistente tan solo en la infusión de tres tazas de té negro al día.
Cómo consumir el té negro
Bastará con tomar el té recién hecho, caliente o frío, pero cuidando de que no se trate de una variedad altamente procesada y con numerosos aditivos químicos. Lo mejor es consumir un té lo más natural posible en varias infusiones al día. El desayuno, media mañana y la tarde son las horas indicadas para hacerlo.
Ten en cuenta que este tratamiento no solo es para aquellas personas que sufran una afección cardiaca actualmente, pues sus propiedades preventivas lo vuelven indicado para toda persona, por lo que no estaría de más que lo tengas en cuenta a la hora de organizar tu alimentación diaria.