Ahorrar dinero y comer saludable. En la economía actual, muchos de nosotros estamos tratando de ahorrar dinero todo lo que podamos. Como vivir en un presupuesto se hace lo más importante, puede ser extremadamente útil para todos nosotros buscar la forma de hacer rendir nuestro dinero y aún así sostener en tu hogar una dieta saludable.
Afortunadamente, hay muchas formas creativas de hacer esto y precisamente a ello enfoca este post. Se necesita un poco de conocimiento, tiempo y planificación, pero es posible disfrutar de la comida sana a bajo precio. En términos generales, comienzo por señalar que cuanto más te centres en la compra de alimentos, sin procesar y preparares las comidas en el hogar, más saludable será tu comida y menos el dinero que gastarás.
He aquí algunos consejos:
Te invito a tomar decisiones inteligentes y ahorrar dinero. Es muy importante evaluar cómo gastas tu dinero en comida. ¿Qué artículos innecesarios sueles comprar? ¿Comes alimentos cocinados fuera de casa con frecuencia? La primera manera de ahorrar dinero en comida es limitar o recortar el gasto en alimentos innecesarios.
Algunas de las formas específicas de hacer esto son:
- Corta con la comida “basura”. Evalúa la cantidad de dinero que estás gastando en productos como los refrescos (regular o de dieta), galletas, galletas, comidas pre-empacadas, los alimentos procesados, etc. Si no quieres eliminarlos, piensa tan sólo en limitarlos y créeme que notarás la diferencia… Tu bolsillo y tu cuerpo te lo agradecerán.
- Come menos. Así de simple. Incluso sólo la reducción de algunas de tus comidas por 1 o 2 veces por semana puede significar ahorros muy significativos por semana. Esta es una manera fácil de ahorrar dinero, controlar tu peso e incluso tener algo extra para gastar en alimentos de mayor calidad.
- Come frutas y verduras por menos
Las frutas y verduras congeladas son, usualmente, más baratas que las frescas y son igual de nutritivas (incluso a veces más). Un vegetal que ha sido congelado después de haber sido cosechado tendrá más nutrientes que uno que fue recolectado, transportado desde otro país y almacenado en tu refrigerador un par de semanas más. Si quieres productos frescos, es más económico si los compras cuando son de temporada. - Consume menos carne
No todos tus platillos deben tener carne, la cual es, con frecuencia, la parte más cara de la comida. Utiliza alternativas proteínicas como frijol, lentejas, tofu o queso. Consulta la Guía Canadiense de Alimentación para obtener sepas qué alimentos son altos en proteínas. O también puedes reducir, simplemente, la cantidad de carne que utilizas, ya sea que la cocines sola o con algún otro ingrediente, como en la salsa de espagueti. - Compra frutas y verduras de estación: De esta forma es más fácil y más barato mantenerte saludable y ahorrar dinero. Por ejemplo, en invierno compra: naranjas, manzanas, kiwis, espinacas y brócoli. En primavera: uvas, mangos, fresas, sandía, papas y zanahorias. En verano, papas, tomates, aguacates, duraznos. Finalmente, en el otoño: zanahorias, brócoli, peras, kiwis y melón son buenas opciones.
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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