Todo sobre el limón. Una fruta versátil como pocas: buena para todo y para muchas cosas que van más allá de alimentarse, por ejemplo recetas caseras de belleza, de salud y de limpieza, que son increíblemente eficaces. Te invito a conocer mejor aún este verdadero milagro de la naturaleza…
Dentro de la gran variedad de frutas de la Naturaleza, el limón se destaca sobre las demás debido a todas sus propiedades y versatilidad. Sus usos no se limitan a los platos gastronómicos, sino que también es requerido en la medicina, limpieza, farmacia y perfumería. Su propiedad más conocida es su particular acidez, determinada por ácido cítrico, con un valor aproximado de pH de 2.1.
Se emplea en el universo de la gastronomía en diversas preparaciones como mayonesas, cremas, pasteles, galletas, salsas y helados. Su poco contenido de azúcar hace del limón un ingrediente apto para elaboraciones tanto dulces como saladas. Contiene minerales y gran cantidad de vitaminas, y su utilización medicinal se asocia por sus altos aportes de vitamina C. Es un fortalecedor de todo el sistema inmunitario, además de colaborar con la formación de colágenos y antioxidantes en el organismo. El limón es el indicado al momento de curar y prevenir resfriados, infecciones y gripes. A todo esto le podemos agregar las propiedades de ayuda en la absorción intestinal del hierro y excelente cicatrizador de heridas.
Por si todo esto fuera poco, el limón es utilizado con gran éxito en la limpieza por su buen desempeño. Dispone de la acidez necesaria para remover algunas suciedades y limpiar objetos metálicos y sobre todo de cobre. Del total de producción de limón en todo el mundo, solamente una parte es con destino al consumo humano como fruta, ya que la mayor parte es enviada para la elaboración de productos industriales. Algunos de los subproductos que se logran son: jugos, aceites especiales utilizados en farmacia y perfumería, limoneno que es un solvente usado en industrias, raciones para animales y alcoholes.
Todos los productos por más naturales que sean, pueden ocasionar algunos daños menores, y el limón no resulta la excepción. Un consumo demasiado extenso de manera cruda puede afectar el esmalte de los dientes y los derivados de los aceites esenciales contienen algunas sustancias que pueden ser tóxicas para determinadas personas.
La vitamina C o ácido ascórbico posee gran poder desinfectante y tiene además una acción antitóxica frente a los venenos microbianos y medicamentosos. Junto a la vitamina C se encuentra la vitamina P que ayuda a tonificar los capilares y vasos sanguíneos.
Es llamada también vitamina de la permeabilidad capilar ya que sin ella los capilares sanguíneos se vuelven frágiles y peligran romperse con facilidad, provocando pequeñas hemorragias.
Ayuda a cicatrizar heridas de todo tipo, aplicándolo interior y exteriormente.
El limón es muy rico en minerales entre los que se destacan potasio, magnesio, calcio y fósforo ( contiene también sodio, hierro y flúor ).
El potasio, por ejemplo, es un elemento esencial para la vida y beneficioso para el tratamiento de la hipertensión arterial.
Cuenta con algunas vitaminas del complejo B ( B1, B2, B3, B5, B6, PP ).
La vitamina B1 ( tiamina ) previene y cura la enfermedad del beriberi cuyos síntomas son parálisis, edema e insuficiencia cardíaca. Interviene además en el metabolismo de los hidratos de carbono.
La vitamina PP ( niacina ) previene contra la piel áspera, pelagra. Enfermedad que se manifiesta por la inflamación de la piel, mala digestión y alteraciones mentales. Esta vitamina es muy necesaria para conservar la salud de la piel, el aparato digestivo y el sistema nervioso.
El Limón es un fruto que podríamos definir como medicinal por excelencia ya que actúa como curativo en más de 150 enfermedades.
En cualquier parte del organismo donde se encuentren las toxinas, ya sea en la sangre, en los órganos, en los tejidos, el limón una vez ingerido acude para combatirlas disolviendo sus acumulaciones y expulsarlas.
En casos de intoxicación gastrointestinal por consumir alimentos en mal estado o combinar mal los alimentos o digestiones pesadas y malestares del hígado y vesícula, el limón actúa normalizando las funciones alteradas, neutralizando las toxinas y ayudando en su eliminación.
Es además un gran consumidor de microbios y el mejor protector contra las enfemedades infecciosas.
En los casos de fiebre ayuda a eliminarla, oxidando y excretando los tóxicos que no han sido debidamente neutralizados y eliminados. A excepción de la fiebre reumática.
El limón es bueno en casos de hipertensión, arteriosclerosis y enfermedades cardiovasculares ( activando la circulación de la sangre ), en casos de diabetes colabora en evitar complicaciones relacionadas con las arterias.
Previene la formación de cálculos renales y puede llegar a disolverlos lentamente.
Al igual que cualquier medicamento el consumo del limón su consumo está directamente ligado a las condiciones física de cada persona pues, si bien es un gran aliado de la salud también su consumo deberá ser restringido frente a situaciones particularizadas, que puede estar padeciendo un individuo siendo en esos casos su consumo no indicado.