El senderismo es una actividad que en estos últimos tiempos se ha puesto muy de moda, se trata de un deporte muy interesante en la que puedes disfrutar del aire libre y ejercitar tus músculos de forma muy eficaz. Sin embargo, si eres principiante en la misma hay algunos consejos que es importante tengas en cuenta, de forma que sea una actividad divertida y no se convierta en un susto por alguna lesión o movimiento mal realizado.
Queremos hablar sobre la indumentaria y los utensilios que necesitarás para realizarla, hoy hablamos sobre la primera y en la próxima nota te contamos todo sobre lo segundo. Debemos tener en cuenta que en el senderismo nos movemos en territorio salvaje, por lo que encontraremos muchos desniveles y tendremos que adaptarnos al terreno que nos encontramos.
Lo primero a considerar por tanto es la ropa, generalmente los movimientos en el senderismo son bruscos, por lo que necesitaras algo que sea cómodo pero al mismo tiempo no demasiado holgado. En el mercado puedes encontrar prendas elásticas que se adaptan al cuerpo, por lo que es como si fueran nuestra segunda piel. Otro punto fundamental es el calzado, las botas que elijamos deben ser resistentes y elaboradas especialmente para terrenos salvajes. Si bien las zapatillas de deporte son una buena opción, no son las más adecuadas, es mejor optar por algo que mantenga el tobillo sujeto.
Debemos tener en cuenta en primer lugar la época, y en segundo la preparación de cada uno a nivel físico y vamos a referirnos a una persona con una preparación media-baja, o sea, un paseante como lo somos la mayoría.
Calzado.
Empezando por los pies lo normal será llevar un calzado ligero ya sea de bota o zapato de trekking el cual debe ser ya impermeabilizado de una rigidez de media a blanda porque el camino no es fácil y tiene constantes contactos con las piedras, complementado por unos calcetines no demasiado gruesos pero a poder ser de una fibra de secado rápido para que nos mantenga el pie lo mas seco posible.
La ropa, como cebollas.
La forma más adecuada de vestirse a la hora de realizar una actividad de montaña es seguir el denominado sistema de capas. Siempre se aconseja utilizar ropas ligeras de una gran transpiración y una notable ligereza.
Para ello empezaremos por la capa más próxima a la piel. Su principal misión consistirá en mantener un nivel de humedad adecuado y evaporar el sudor de forma que nos permita mantenernos secos para esta ocasión. Entrado el otoño, se aconsejan camisetas térmicas no muy gruesas, bien sea de un componente natural como lana de merino o un componente de origen sintético como el polipropileno.
Como segunda capa, puede recurrirse al siempre eterno forro polar en su variedad de grosores o tejidos más novedosos, como pueden ser el powerstretch o las chaquetas de fibra.
En la medida de lo posible se recomienda utilizar como segunda capa sólo materiales sintéticos ya que estos además de proporcionar una fuente adicional de poder calorífico nos ayudarán a continuar evacuando la humedad producida por la sudoración.
Para la tercera y última capa, utilizaremos una prenda que sea impermeable, transpirable y cortavientos, hoy en día se encuentra una amplia gama de membranas en el mercado adecuadas a la actividad a desarrollar.
Es importante que sea ligero para que no nos de pereza llevárnoslo.
e pueden encontrar desde inducidos con una buena impermeabilidad, hasta membranas de gama alta como el gore-tex, event o sympatex de una gran transpiración e impermeabilidad pasando por membranas intermedias del tipo dehyvent, h2no o precip con unos precios más asequibles y buenos resultados para actividades menos exigentes. Lo que nunca se debe descuidar en estas prendas impermeables es el termosellado de las costuras, pieza clave para conseguir una gran impermeabilización.
Material suplementario.
De forma ocasional podremos emplear un tercer tipo de prendas conocidas comochaquetas cortavientos o shoftshell que son recomendadas para utilizar como chaqueta en aquellos días que no amenaza lluvia porque solamente cortan el viento y ofrecen una pequeña resistencia al agua.
En cuanto a pantalones, siempre será conveniente usar un pantalón hidrófugo para que no nos almacene sudor o lluvia y en todo caso, seque lo antes posible. Además es conveniente que sea cómodo y no demasiado grueso ya que en las piernas no sufrimos el frío como en el torso y caminando, menos.
Como material aparte hay que pensar siempre en la cantimplora o la bolsa de hidratación (siempre muy importante en Picos) y un bastón que nos de más confianza para la marcha.
* En este articulo hablamos de un equipamiento básico especializado, evidentemente en cada apartado podemos sustituir cosas que no tengamos por otras de uso común aunque es inevitable el buen calzado, la camiseta y el chubasquero que son los que nos van a dar un confort extra en caso de meteorología adversa, porque si la meteorología es perfecta, vamos a necesitar poco mas que ganas para disfrutar de la montaña.
Además de la indumentaria que debemos elegir con cuidado, siempre buscando la máxima comodidad y utilidad, debemos echar mano de algunos utensilios necesarios para mejorar el desarrollo de la actividad. En esta ocasión vamos a recomendar el uso de un bastón o bastones para ayudarnos a caminar y afianzarnos mucho mejor al terreno. Esta herramienta lo que hará será servirnos de apoyo a la hora de subir o bajar cuestas y a la hora de caminar, ya que será él el que aguante parte de la tensión que se genera en estos momentos, y no nuestro cuerpo, mejorando así nuestro estado y evitando posibles lesiones.
Es importante que tengamos en cuenta estos puntos y que en la medida de lo posible los llevemos a cabo para hacer del senderismo una actividad ideal para practicar deporte en estos meses primaverales del año, que es cuando la naturaleza está en su mejor momento y nos permitirá disfrutar de un espectáculo único a la vez que cuidamos nuestro cuerpo.
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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