Olfato, ¿cómo funciona?, vídeos. Uno de los sentidos más enigmáticos y antiguos de nuestro cerebro, a través del olfato volvemos a revivir recuerdos, en Demedicina.com, el olfato.
Nuestros sentidos nos ayudan a sobrevivir y adaptarnos al medio. El sentido del olfato está muy desarrollado en muchos animales como el gato o el perro ya que para ellos es fundamental. En el hombre el sentido más desarrollado es la visión.
El sentido del olfato es un sentido químico. Sentidos químicos son el gusto y el olfato. Se les llama así porque para percibir un determinado olor necesita darse una reacción química entre ese estímulo u olor y los receptores del sentido del olfato. El sentido del olfato nos ayuda a identificar alimentos y a evitar sustancias que puedan ser peligrosas para nuestra salud.
El sentido del olfato es vital en muchas especies de animales, para seguir una presa, detectar a los posibles predadores, a las hembras o machos de la especie.
Órgano olfativo
- Tenemos más de 50 millones de receptores olfativos que están en dos zonas del epitelio olfatorio. En la base del cerebro tenemos los bulbos olfatorios. Los receptores olfativos aportan información a través de axones que llegan hasta los bulbos olfativos.
- La investigación sobre cómo funciona el sentido del olfato ha avanzado en los últimos años. Los receptores olfativos reconocen olores variados y también olores únicos. Una combinación de distintos receptores nos facilita el poder reconocer hasta 10.000 olores distintos.
- La maquinaria que usa nuestro sistema olfativo para que podamos reconocer tanta cantidad de olores distintos es única. Linda Buck profesora asociada de Harvard, compara el eficiente sistema olfativo con las cartas que se usan en distintas combinaciones para formar palabras individuales. Este sistema reduce el número de sensores necesarios para codificar los distintos olores
El proceso
- Es bastante complejo, una molécula entra por la nariz y es reconocida por los sensores olfativos. Estos envían señales a los bulbos olfativos, de esta forma la señal llegará a la zona sensorial del olor del cerebro.
- El sistema olfativo tiene una peculiaridad importante, la información trasmitida viaja a la corteza pero también al sistema límbico. El sistema límbico es la parte primitiva del cerebro que incluye también zonas que controlan las emociones, el comportamiento y la memoria.
- Dado que la información olfativa va no solo a la corteza sino a una parte primitiva del cerebro que se relaciona con las emociones nos afecta más de lo que pensamos.
El olfato evoca recuerdos
- Olemos un aroma al andar por la calle y recordamos algo que vivimos hace años. Los olores tienen la capacidad de evocar nuestros recuerdos incluso aquellos que creíamos olvidados. El estímulo para el olor consiste en sustancias volátiles con un determinado rango molecular entre 15 a 300. Aunque casi todos las sustancias olorosas son orgánicas algunas no tienen olor.
- ¿Porqué ciertos olores pueden desencadenar recuerdos incluso sucedidos hace muchos años?, ¿como es posible si las neuronas sensoriales del epitelio olfativo solo viven aproximadamente 60 días?
- La respuesta es que las neuronas del epitelio tienen sucesores. Cuando las neuronas olfativas mueren las nuevas neuronas olfativas toman el papel que realizaba la neurona que ha muerto. Las memorias sobreviven porque los axones de las neuronas que expresan el mismo receptor siempre van al mismo lugar.
- En el hipocampo almacenamos recuerdos, la memoria relacional hace de disparador del recuerdo al evocar un aroma.
- Infravaloramos el sentido del olfato, pensando que la vista y el oído son más importantes pero el olfato desde el punto de vista evolutivo juega un papel fundamental.
- Nos ayuda a reconocer sustancias que podemos comer o a detectar venenos. Esta cualidad la tienen casi todo los mamíferos, ya que es una característica vital para la supervivencia, por ello el olfato es una de las partes más antiguas del cerebro.
- Trygg Engen profesor de psicología en la Universidad de Brown, comenta que el olor nos sirve como un índice para recuperar de forma rápida los recuerdos almacenados en el cerebro. Esta es probablemente la razón por la que el olor actúa como un disparador rápido de recuerdos más que ver o escuchar.