Una buena madre quiere siempre lo mejor para su bebé, y si queremos tener uno bien sano entonces debemos cuidar la alimentación durante el embarazo. Durante esta etapa las necesidades tanto de macro como de micronutrientes incrementa, por lo que tendremos que modificar nuestra alimentación en consecuencia para que de esta manera a nuestro bebé no le falte de nada.
Durante el embarazo la mujer necesita un mayor aporte de proteínas, algunas vitaminas como el ácido fólico y minerales tales como el hierro, además de incrementar tu ingesta calórica levemente debido a que tienes a otra persona a la que alimentar dentro de ti.
Debemos limitar la comida basura o chatarra ya que contiene grasas transgénicas y otras substancias nocivas para la salud tanto de la madre como del bebé, además contiene una gran cantidad de calorías y casi nada de micronutrientes, la creencia existente sobre que en el embarazo hay que comer por dos, es sólo un mito que nada más te creará más grasa.
En cuanto a las necesidades calóricas, durante el primer trimestre estas pueden permanecer en un nivel que nos ayude a mantener el peso, es decir, que debemos dejar nuestras calorías tal y como estaban.
Durante el segundo trimestre debemos añadir únicamente unas 300kcal extras diarias a nuestra alimentación, esto es por ejemplo unos 100 gramos de arroz a día. Y por último durante el tercer trimestre podemos incrementarlas un poco más, alrededor de 500kcal al día.
Básicamente lo que debemos conseguir es mantener nuestro peso estable, sin que este baje ni suba en exceso.
En última instancia, debido al incremento de las necesidades de micronutrientes es recomendable que la madre use un suplemento vitamínico-mineral, como unas vitaminas pre-natales. Esto evitará un déficit de estos nutrientes los cuales son muy comunes durante el embarazo, estas fórmulas pre-natales están optimizadas y creadas específicamente para este tipo de situaciones, así que no son para nada nocivas.
¿Qué alimentos debo evitar durante el embarazo?
Debemos evitar todos aquellos lácteos no fermentados tales como el requesón ya que aquí las bacterias crecen con facilidad y pueden causarle problemas al bebé, pudiendo causarle una enfermedad denominada listeriosis.
También por la misma razón debemos de evitar el marisco y el pescado crudo, así que a las amantes del sushi, el embarazo en este sentido no les hará demasiada gracia.
Debemos de tener cierta precaución con los embutidos, como los chorizos, salchichas… por exactamente la misma razón.
También debemos limitar la ingesta de mercurio, así que no te excedas en el consumo de pescados como el atún en lata, es recomendable en este caso elegir las alternativas más bajas en mercurio, ya que el pescado azul es alto en omega-3, algo necesario para la salud y correcto desarrollo del bebé.
Y como es algo normal, debemos de eliminar completamente el alcohol y substancias tales como la cafeína y el tabaco mientras estemos embarazadas, ya que obviamente son extremadamente perjudiciales para el bebé.
Resumiendo
La alimentación durante el embarazo no debe cambiar demasiado, pero sí debemos enriquecerlas con mejores alimentos y opciones más sanas, y evitar algunos alimentos que pueden perjudicar a nuestro bebé, fuera de esto, la alimentación en esta etapa es fácil de seguir.
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