Todos de vez en cuando necesitamos un impulso extra para poder concretar nuestras tareas, sin embargo, lo que nos puede ayudar de vez en cuando como una taza de café, cuando se vuelve una costumbre, puede traer problemas en nuestro cuerpo o lo que también se conoce como las consecuencias de la cafeína en el cuerpo.
Hay que considerar que la cafeína es un componente común que puede ser encontrado en el café, en múltiples té, sin mencionar un montón de bebidas energéticas que también cuentan con este componente.
Sin embargo, como se suele decir por estos lados, todo lo que se consume en grandes cantidades, puede generar problemas, y la cafeína no es ninguna excepción a esta regla. Entonces, porque la cafeína en exceso es mala para nuestro cuerpo.
Consecuencias de la cafeína que son negativas
Para comprender las consecuencias de la cafeína, debemos saber que su consumo en exceso llega a generar cambios potentes en nuestra salud, por ejemplo, tal como sucede con las drogas, el cuerpo puede llegar a generar una dependencia a la cafeína.
Lamentablemente, es más común de lo que se piensa, pero hay personas que son dependientes de la cafeína, algo que comenzó simplemente con el consumo de un par de tazas de cafés temprano por las mañanas.
Si somos una persona que no puede comenzar su dia sin consumir una taza de café, debes saber que puedes estar experimentando una dependencia a la cafeína, sin embargo, esta no es químicamente adictiva, que quiere decir esto, simple, que a diferencia de lo que sucede con otras sustancia como la nicotina, la cual es sumamente peligrosa, no se llegara a sufrir de un síndrome de abstinencia que se suele generar con las drogas.
La abstinencia vinculada con el dejar el café, está más relacionada con el sufrir de un dolor de cabeza, fatiga prolongada y un estado en el cuerpo similar al que se cuenta cuando se sufre de un resfrió, síntomas que irán a la baja con el paso de los días.
Insomnio y problemas de sueño:
El consumo excesivo de cafeína, especialmente en horas de la tarde o noche, puede interferir en la calidad del sueño y causar insomnio. Esto puede llevar a una disminución del rendimiento diurno, fatiga y problemas de concentración.
Dependencia:
La cafeína es una sustancia adictiva. El consumo regular puede llevar a la tolerancia, lo que significa que se necesita cada vez más cafeína para lograr los mismos efectos. La falta de cafeína en personas dependientes puede provocar síntomas de abstinencia, como dolores de cabeza, irritabilidad y fatiga.
Problemas digestivos:
La cafeína puede estimular la producción de ácido en el estómago, lo que puede provocar acidez estomacal y problemas gastrointestinales en algunas personas.
Ansiedad y nerviosismo:
El consumo excesivo de cafeína puede aumentar la ansiedad y el nerviosismo, especialmente en personas propensas a estos trastornos. Puede provocar palpitaciones, temblores y sudoración excesiva.
Aumento de la presión arterial:
La cafeína puede causar un aumento temporal de la presión arterial, lo que puede ser problemático para personas con hipertensión. Si bien este efecto es generalmente moderado, es importante tenerlo en cuenta.
Osteoporosis:
El consumo excesivo de cafeína puede interferir en la absorción de calcio, lo que podría contribuir a la pérdida de densidad ósea a largo plazo.
Otras de las consecuencias de la cafeína que se pueden considerar como negativas, son que el consumo de este compuesto, puede generar una irritabilidad mayor, además de un deshidratación, algo que se debe a que cuando se consume café en grandes cantidades, se orinara más de lo normal, algo que se ve combinado con un ritmo cardiaco elevado, que pueden terminar en problemas cardiacos.
A los problemas antes señalados, se pueden sumar trastornos de ansiedad y problemas con el sueño, algo que se explica debido a que la cafeína es capaz de bloquear la adenosina.
La adenosina es un químico que se llega a producir en nuestro cerebro, el cual tiene como papel fundamental, regular el descanso del cuerpo. Entonces, al no producir este compuesto, el cuerpo estará en alerta de manera constante.
Como dejar de consumir cafeína
Si estamos experimentado uno de los problemas antes señalados que está vinculado con el consumo de cafeína, deberemos si o si reducir el consumo de este compuesto, sin embargo, para evitar problemas mayores, se debe disminuir su consumo de manera gradual, debido a que como antes fue señalado, el cuerpo llega a generar cierta dependencia.
Si tratas de dejar de consumir cafeína de golpe, es posible que no lo logres, debido a que los dolores de cabeza, fatiga e irritabilidad puede ser insoportable, retomando tu antigua rutina en un par de horas.
Entonces, para comprender como se debe dejar la cafeína te damos un ejemplo, si cada dia consumes cerca de 4 tazas de cafés, tienes dos opciones, la primera bajar la cantidad de tazas a tres o consumir tres y una cuarta taza de café descafeinado.
Hay que considerar que el café descafeinado sigue teniendo cafeína, solo que en menor cantidad, por lo que se considera una gran estrategia para reducir el consumo de cafeína de manera gradual.
Reducción gradual:
Si eres un consumidor regular de cafeína, considera reducir gradualmente tu ingesta en lugar de dejarla de golpe. Esto puede ayudar a minimizar los síntomas de abstinencia.
Reemplazo saludable:
Sustituye las bebidas con cafeína por opciones saludables, como agua, té de hierbas o café descafeinado.
Mantén un horario regular:
Establece un horario fijo para el consumo de cafeína y evita consumirla después de cierta hora para evitar problemas de sueño.
Mantén un estilo de vida saludable:
El ejercicio regular, una dieta equilibrada y una buena higiene del sueño pueden ayudar a reducir la necesidad de cafeína para mantener la energía.
Busca apoyo:
Si te resulta difícil dejar la cafeína, considera hablar con un profesional de la salud o un terapeuta que pueda brindarte apoyo y estrategias para superar la dependencia.
También se recomienda que cada una semana y media, se vaya reduciendo una taza de café o que se reemplace por una de café descafeinado. Todo esto hasta concretar nuestra meta de eliminar la cafeína o disminuirla al mínimo.
También se deberá evitar el consumo de este compuesto los días de descanso, por ejemplo, los fin de semana deberán ser utilizados para descansar en la comodidad del hogar.
Conclusión:
La cafeína puede ser un aliado útil en la vida cotidiana, pero su consumo excesivo puede tener consecuencias negativas para la salud. Si decides dejar la cafeína, hazlo de manera gradual y busca apoyo si es necesario. Al hacerlo, puedes experimentar una mejora en tu calidad de vida y bienestar general.