El aceite de ricino (llamado aceite de castor por su traducción desde el inglés), contiene muchas sustancias que nos aportan grandes propiedades para nuestro organismo, fundamentalmente para nuestra piel, siendo de ayuda en muchas enfermedades y condiciones difíciles de mejorar.
En OtraMedicina te contamos cómo ayuda el aceite de ricino a nuestra piel, con lo que comprenderás sus beneficios y sabrás cómo la puedes utilizar para lograr tener una piel bella y sana.
El aceite de ricino
El ricino es un arbusto que posee semillas con las que se produce su conocido aceite. El aceite de ricino tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que son muy beneficiosas para nuestro organismo. Por ejemplo, puede utilizarse para enfermedades como la esclerosis múltiple, mal de Parkinson, artritis, alteraciones gastrointestinales, dolores menstruales, migrañas, pie de atleta y alteraciones de la piel.
Beneficios para la piel
El aceite de ricino contiene muchos antioxidantes, proteínas, minerales y vitaminas que son de gran ayuda para la piel, por lo que si lo aplicas regularmente podrás mejorar alteraciones como: