Causas que contribuyen a la aparición de la celulitis. Después de la adolescencia, suele aparecer esta enfermedad metabólica, que se caracteriza por una alteración de los adipocitos -células del tejido adiposo-, las cuales se inflaman y se vuelven más rígidas, suponiendo un problema circulatorio, linfático y por supuesto estético.
Las causas de la celulitis pueden ser variadas, se pueden deber a cambios hormonales, como los surgidos en el embarazo o el consumo de píldoras anticonceptivas, también pueden ser genéticas, con predisposición para aquellas personas con antecedentes familiares, que han padecido esta enfermedad. La tensión acumulada debida al estrés impide la adecuada circulación.
El café y el tabaco también contribuyen a la aparición de celulitis, ya que son tóxicos y el tabaco como tal, deteriora la microcirculación e impide nutrir adecuadamente las células, además el sedentarismo empeora la enfermedad, ya que hay que tener en cuenta que el ejercicio activa la circulación y mejora el metabolismo de las grasas.
La alimentación debe de ser baja en grasas saturadas y azúcares, así como un consumo moderado de sal, para evitar retener líquidos. Consume mucha agua para facilitar la eliminación de los nódulos de grasa, utiliza ropa adecuada, que no apriete demasiado el cuerpo, para que exista una correcta circulación sanguínea y ten en cuenta que determinados problemas digestivos y hepáticos, y una mala circulación contribuyen a agravar el problema de la celulitis.
Causas inevitables…
• Ser mujer… Las mujeres tienen el doble de células grasas que los hombres, y el 25% de su peso corresponde a la grasa, frente al 12% masculino.
• El papel de las hormonas. Las hormonas femeninas están asociadas a la celulitis. Por esa razón, se hace especialmente notable en periodos de grandes cambios hormonales, como la adolescencia, el embarazo o la menopausia.
• El paso del tiempo. La edad cambia el estado de la piel, que pierde tersura y tonicidad. Por esa razón, a menudo la celulitis se hace más visible con el paso del tiempo.
• La genética también influye. Hasta a la hora de tener celulitis cuentan los genes… Las mujeres cuyas madres y abuelas la tienen, poseen muchas más papeletas a la hora de contar con “hoyitos”.
…Y otras contra las que sí puedes actuar
• ¡En forma! Pasarse el día sentada contribuye a la formación de piel de naranja. El ejercicio es una excelente forma no sólo de combatirla, sino incluso de retrasar o impedir su aparición.
• Alimentación. La mala alimentación afecta directamente a la celulitis. Con ello nos referimos a las dietas ricas en azúcares y en grasa y pobres en agua, que puede contribuir a agravar los problemas circulatorios y de retención.
• Ojo con la circulación. Los tacones, las botas apretadas y la ropa ajustada. Es decir, todo aquello que comprima la circulación.
• El estreñimiento. No sólo es molesto: ¡hasta ayuda a la formación de celulitis! Por eso (y por muchas razones más) conviene tomar una alimentación rica en fibra, con abundante ingesta de fruta y verdura.
• el cigarrillo. El tabaco, que ya se sabe que no es bueno para nada, incluido un aspecto terso de las piernas. Por cierto, el alcohol y la cafeína también pueden contribuir a empeorar la celulitis.