Los padres son proclives a aplicar pomadas para aliviar los síntomas en los ataques de urticaria en niños. Vemos que los pequeños se desesperan con el picor, nos alarmamos con las manchas rojas y la hinchazón. Sin embargo, debemos saber que las cremas antivirales no son efectivas y que hay distintas causas por las que se pueden producir estos ataques.
Si bien el diagnóstico de la urticaria es muy sencillo, conocer sus causas es uno de los problemas más difíciles de resolver, sobre todo cuando laurticaria en el niño no es un episodio pasajero, sino que permanece durante tiempo. Sin embargo, conocer sus causas es necesario no sólo para establecer un tratamiento, sino, sobre todo, para prevenir su aparición: evitando exponerse a las causas que la provocan, se reduce notablemente las probabilidades de sufrir este trastorno.
Éstas son algunas de las causas más comunes que desencadenan laurticaria en el niño:
– El roce la piel: desde la punta de un lápiz que roza la piel, al contacto con un mueble, toallas, mantas, una pulsera, la correa del reloj…
– Un estímulo demasiado intenso. La exposición prologanda al calor de un radiador o de una estufa, un baño muy caliente, el sudor, los alimentos demasiado picantes, un esfuerzo físico intenso o incluso una fuerte emoción pueden hacer aparecer sobre la piel del niño, después de 2-10 minutos, puntitos rojos rodeados de una zona enrojecida, que, sin embargo, desaparecerán al cabo de una hora.
– El frío. Existe la denominada «urticaria por frío» que está causada por el contacto con el agua, aire y objetos fríos. Cuanto más baja es la temperatura, tanto mayor es la reacción, que aparece al cabo de pocos segundos o minutos, que normalmente sólo afecta a la zona expuesta.
– Los aditivos alimentarios. Son una de las causas principales de laurticaria en el niño, en particular de la crónica.
– Algunos alimentos, como la leche, el pescado, la carne, los huevos, las habas o las nueces, pueden provocar urticaria.
– Fármacos. La penicilina, pero también el ácido acetilsalicílico y otros fármacos antiinflamatorios, hacen más permeables las paredes del intestino y pueden, por tanto, favorecer la aparición de urticaria. La aspirina, uno de los fármacos más usados en el mundo, contiene ácido acetilsalicílico.
– Infecciones. Causadas tanto por bacterias como por virus; por hongos, como la cándida albicans: tienen entre sus manifestaciones la urticaria.
– Factores psicológicos. Los estudiosos no están de acuerdo al afirmar que la urticaria pueda estar causada por factores psicológicos, pero, seguramente, el estrés y las emociones fuertes pueden hacer que el niñosea más sensible a los agentes irritantes que provocan la urticaria.
– En algunos casos, la urticaria es de origen hereditario.
En la mayor parte de los casos, la urticaria se resuelve en poco tiempo sin necesidad de recurrir a tratamientos específicos. De todos modos, es importante tomar nota de las circunstancias en las que la urticaria tiene lugar, para guiar al pediatra en su diagnóstico. Hay que visitar al pediatracuando la urticaria en el niño aparece en más de una ocasión.
Cuándo hay que dirigirse al pediatra
Puede ser necesario llevar al niño a un centro de urgencias si la crisis de urticaria está acompañada de otros síntomas, es decir, si al niño le cuesta respirar y tragar. En espera de la intervención médica, se le puede hacer succionar un trozo de hielo. También es aconsejable contactar con el pediatra si:
– La urticaria aparece de repente después de que el niño haya tomado un medicamento o le haya picado un insecto.
– El niño se encuentra mal.
– El niño tiene fiebre.
– Tiene dolor e hinchazón en las extremidades.
– El problema no mejora pasados unos días.
– Los episodios de urticaria son recurrentes y no se consigue identificar la causa.