Estas en la búsqueda de perder peso, pero te sientes demasiado perezoso o te falta tiempo para ir a un gimnasio, en estos escenarios, muchos deseamos algún truco el cual debiese ser sencillo, que nos ayude a perder peso rápidamente, bueno, parece que hay una respuesta a estos pensamientos.
Estamos hablando del agua caliente, un elemento muy común que se utiliza prácticamente todos los días en nuestro hogar. Puede ser difícil de creer, pero hay quienes señalan que este elemento puede ayudar en la pérdida del peso ¿es realmente cierto?
Se debe conocer que una de las formas más naturales para mantener a nuestro cuerpo hidratado es el consumir suficiente agua por medio de cualquier forma, esto quiere decir ya sea fría o caliente. Esto se debe a que cada célula de nuestro cuerpo necesita de agua para poder absorber los nutrientes necesarios y expulsar todos los desechos. Los expertos siempre señalan que debemos beber al menos ocho vasos de agua por día para mantener así el cuerpo hidratado. La hidratación ayuda a que los riñones expulsen desechos y toxinas, además de que proporciona una plataforma adecuada para que se lleven a cabo todos los procesos bioquímicos y metabólicos dentro de nuestro cuerpo.
El agua es vital para la supervivencia. Debido a eso médicos, nutricionistas y expertos en la salud nos recomiendan el beber entre 7 a 8 vasos. Mientras que algunas personas suelen preferir el agua fría, hay muchos asesores que recomiendan beber agua caliente o tibia. Ellos postulan que el agua caliente o tibia es buena para el cuerpo y entrega más beneficios a la salud que el beber agua a temperatura ambiente o fría.
Agua caliente para adelgazar
Como un limpiador Natural: El beber agua caliente o tibia, ayuda en la limpieza del organismo. Por ejemplo, es un eficaz tratamiento para sanar problemas relacionados a la digestión, para lograr esto, tan solo se deben beber dos vaso de agua caliente al día.
También se recomienda beber un vaso de agua caliente por la mañana, lo que ayuda a eliminar las toxinas en el cuerpo. Esto se logra debido a que el agua caliente en el estómago vació (por la mañana) ayuda a que se generen los movimientos intestinales, curando el estreñimiento.
Para la pérdida de peso; El agua caliente descompone los depósitos de grasa que se generan en el cuerpo, lo que ayuda en la pérdida de peso. El tener un cuerpo bien hidratado, ayuda que los músculos trabajen más rápidamente, quemando más calorías. Se debe considerar que un ser humano normal, debería consumir agua caliente 15 minutos antes de cualquier comida, con esto se puede reducir el apetito. Por lo tanto, el agua caliente lograría que se evitara comer en exceso y la ingesta de calorías también se reduciría en casi un 13% según investigaciones.
Los expertos señalan que el consumir agua tibia antes del desayuno fomenta nuestras posibilidades de comer pocas calorías durante todo el día. El beber agua tibia por la mañana también restringe los antojos, hidrata nuestro cuerpo y deja a nuestro estómago con la sensación de estar lleno en comparación con el agua fría. Si se bebe agua caliente antes de las comidas, entonces sentirás la sensación de estar satisfecho.
Un factor que genera el sobrepeso, es que muchos confunden la sensación de la sed con la del hambre. Esta confusión lleva a que se genere una dieta inadecuada. A menudo se termina comiendo cuando en realidad se está sediento. Es durante esta confusión, que se recomienda beber un vaso de agua tibia. Si la sensación desaparece, es porque realmente se tenía sed y has logrado con éxito evitar consumir calorías extras. Por lo tanto, es aconsejable el mantener una botella de agua caliente siempre cerca para evitar esta confusión.
Otras técnicas de medicina como la ayurveda y las terapias de curación utilizadas en antigüedad también recomiendan el beber agua tibia durante la mañana con el estómago vacío. Según lo señalado en los tratamientos ayurvédicos, el añadir miel al agua caliente ayuda a mejorar la digestión y promueve una piel sana y radiante. De esta manera los beneficios del agua caliente por la mañana serán mayores.
En caso de que no se esté contento con el sabor sobrio del agua tibia, a esta se le pueden agregar elementos extras, como un té de hierbas, manzanilla o té verde. La conclusión es que el agua caliente puede ayudarnos a perder peso, porque evita que se consuman calorías extras cuando se genera la confusión de tener hambre cuando en realidad se tiene sed, además de que ayuda a que los músculos trabajen más rápido, lo que desencadena que se quemen calorías mas rápidamente.