La piel es una barrera que nos protege contra los agentes externos, pero muchas veces se ve alterada por enfermedades o por agresores que la debilitan, la rompen o la degeneran.
Agentes como los rayos UV, virus, bacterias, enfermedades autoinmunes, entre otros afectan a nuestra piel y nos vemos en la necesidad de restablecer rápidamente esta importante protección, además de tener un valor estético y por nuestra salud.
En Otramedicina te contamos qué puedes hacer en tu casa para ayudar a tu piel a mantenerse fuerte y sana.
- Aloe Vera: la sábila o Aloe Vera es de gran ayuda para el tratamiento de úlceras de la piel, quemaduras y lesiones por congelación. Además prosee propiedades antibacterianas. Esta planta acelera la reparación de las úlceras de la piel, así como aumenta el suministro de sangre a la segunda capa de ella, la dermis, lo que acelera la curación mediante la incorporación de nutrientes vitales y la eliminación de toxinas peligrosas. Se puede utilizar su gel o aplicarla en forma de cremas, siendo efectiva también para el tratamiento del acné.
- Caléndula: la caléndula es ideal para ser utilizada en pequeños cortes de la piel y quemaduras, picaduras de insectos, piel seca y acné. Las flores de la caléndula tienen propiedades antibacterianas y antivirales, calman la inflamación y mejoran la cicatrización. Es potente y suave, por lo que puede ser utilizada en cualquier tipo de piel. El té de caléndula puede ser utilizado como un enjuague facial astringente dos o tres veces al día para el acné.
- Manzanilla: la manzanilla es un agente antiinflamatorio que alivia la piel cuando se utiliza por vía tópica y ayuda al sistema digestivo cuando se toma como té. También tiene un suave efecto calmante sobre el sistema nervioso central y alivia la tensión nerviosa e irritabilidad. A menudo se utiliza para el eczema y la psoriasis. Puedes embeber un paño en el té de manzanilla y aplicarlo en las zonas inflamadas de tu piel, durante quince minutos, cuatro a seis veces al día.
- Aceite de Emú: este aceite es muy efectivo para las heridas, mordeduras, quemaduras y picazón de la hiedra venenosa, así como ayuda al crecimiento del cabello y al rejuvenecimiento de la piel. Se ha combinado con otros ingredientes para hacer productos de limpieza, mascarillas, champús, acondicionadores, cremas de afeitar, lociones para el cuerpo y bálsamo labial.
- Semillas de lino: la linaza proviene del lino, que contiene ácidos grasos omega-3, que son esenciales para la síntesis adecuada de compuestos inmunológicos y anti-inflamatorios. Es útil en el tratamiento de trastornos de la piel como el eczema y la psoriasis, que se asocian con procesos inflamatorios. Una o dos cucharadas de aceite de linaza se deben tomar diariamente, preferiblemente con otros alimentos.