Es muy difícil de imaginar cuán difícil debe ser para un bebe sentir por primera vez un resfriado, sin embargo, este tipo de problema se considera como común, especialmente después de los primeros 6 meses. Entonces, ante la pregunta de que hacer cuando un bebe se resfría, lo primero será mantener la calma, ya que como antes fue señalado, es una posibilidad que nuestro bebe se resfrié durante los primeros meses de vida.
Sobre los síntomas que pueden delatar un resfrió, estos tienden a aparecer lentamente, en donde la primera cosa que como padres podríamos observar, es que nuestro bebé puede comenzar a estar inquieto e irritable ante cualquier cosa.
Posteriormente, aparecerá un poco de congestión en la nariz del niño, la cual progresará en las fosas nasales generando un goteo en la nariz del niño. Durante un día o dos, nuestro bebé podría sufrir de una fiebre. A esto se pueden sumar dolencias que pueden no ser evidentes para los padres, como dolores de cabeza, un dolor en la garganta y mucho frío. A menudo el frío que sentirá él bebe, persistirá por un tiempo, generalmente se verá acompañado con una tos ronca que es causada por un exceso de moco. Por lo general, los principales síntomas deberían haber desparecido dentro de una semana, especialmente si se tomaron los cuidados recomendados por los pediatras.
Que hacer cuando un bebe se resfría para que no sufra
Para analizar que hacer cuando un bebe se resfría, debemos conocer que en realidad no se pueden curar los resfriados, incluso recurriendo a múltiples remedios, tanto los niños como los adultos sólo podrán tratar los síntomas, a la larga, será nuestro sistema inmune el encargado de combatir el problema.
Cuando un bebe se encuentra resfriado, se recomienda alimentarlo de manera más frecuente, ya sea por medio de pecho o por botellas. Este alimento extra, que suele ser un poco de leche extra, a menudo es la mejor manera de enfrentar el resfriado en un bebe, ya que de esta manera, se le mantendrá hidratado. Si nuestro hijo es mayor a los 4 meses, se le puede ofrecer un poco más de agua de lo tradicional.
Hay que considerar además, que algunos bebés pierden el apetito cuando sufren de un resfriado, mientras que otros simplemente tienen una alimentación más difícil, debido a que al tener su nariz tapada, necesitaran un esfuerzo extra para poder respirar. Si este fuese el caso, podemos ir a nuestra farmacia local y consultar por algunas gotas de solución salina para bebes.
Para ayudar a nuestro hijo a comer de mejor manera cuando se encuentra resfriado, se deben aplicar un par de gotas en cada fosa nasal cerca de 15 minutos antes de que se le alimente. La idea es soltar un poco la mucosidad, para luego usar un aspirados nasal para aspirar un poco los desechos de la nariz de nuestro hijo.
La temperatura corporal
Mientras que los resfriados no son generalmente graves, cuando los bebés son muy pequeños, necesitaremos mantener un especial cuidado en la fiebre que nuestro hijo puede tener.
Hay que ser conscientes de que cualquier bebé menor a los tres meses cuya temperatura sea por encima de los 38° C debe visitar a un médico de inmediato. Mientras que en el caso de los bebés menores de seis meses, deberemos ir a un médico si la fiebre está por sobre los 39° C.
Si nuestro bebé es menor a los tres meses, es recomendado llevarlos al médico cuando esté mal, incluso si como padres pensamos que está sufriendo de un simple resfriado. Se debe saber que los bebes jóvenes, tienen un sistema inmune menos desarrollado y son más propensos a sufrir de una enfermedad, especialmente si estos no están siendo alimentados por sus madres, las cuales por medio de la leche materna, le entregan defensas extras a sus pequeños cuerpos.
Medicamentos
Los padres cuando se preguntan que hacer cuando un bebe se resfría, más de alguno piensa en darles algún tipo de medicamento, sin embargo, es fundamental no dar a nuestro bebé remedios de ningún tipo, ya que estos suelen ser pensados para adultos, por lo que los ingredientes no serán para nada seguros para sus cuerpos tan pequeños.
En conclusión, se deben mantener más o menos los cuidados tradicionales, prestando especial atención a la alimentación y la temperatura corporal del niño. Si él bebe es menor a los tres meses, lo mejor será llevarlo con un especialista, no esperar a que los síntomas desaparezcan por si solos. Siempre es mejor prevenir, especialmente cuando la salud de nuestro hijo está en peligro.