Este tema está dedicado a todas las mujeres que se estrenan como mamás y a las que pronto lo van a ser.
Debemos saber que la piel del bebé es de cuatro a cinco veces más fina que la del adulto y está muy “abierto”, es decir, que sus células no están tan densamente compactadas y aun carece de capa córnea.
Esta capa, es la que se forma de células muertas, crece a medida que la epidermis del bebé entra en contacto con su entorno. Después de cuatro años aproximadamente, la capa córnea ya está completa y puede proveer una protección óptima.
La piel de un bebe tiene un alto grado de hidratación, lo que le da ese aspecto sano y radiante. Sin embargo, en los primeros años de vida, la epidermis absorbe fácilmente las influencias externas así como de los productos de cuídalo corporal. Razón suficiente para tratar la piel infantil con suma precaución, mediante cuidados específicos y de calidad para el bebé.
Debes saber también que las glándulas sudoríparas de la piel del bebé no están completamente desarrolladas, producen poco sudor y aún no pueden regular su temperatura corporal. Comparado con un adulto, un bebé tiene una cabeza más grande es por lo que pierde calor fácilmente.
Por eso es recomendable ponerle un gorro cuando hace frío. Un bebe necesita aproximadamente seis meses para conseguir mantener constante la temperatura de su cuerpo. (Durante esos primeros seis meses, la madre debe proporcionarle el calor que necesita con ropa de calidad y de un tejido natural como lana y algodón, evitando las fibras sintéticas).
Durante estos primeros meses, se aconseja a las madres masajear suavemente al bebé diariamente con aceite vegetal (especial para bebés). Los ingredientes naturales como los extractos de plantas y aceites naturales nutren y protegen la piel de forma suave y natural. De este modo se combinan con la capa hidrolipídica de la piel, que los absorbe fácilmente y los tolera muy bien.
El contacto a través de la piel influye en la salud y el bienestar del bebe. Este hecho, ha sido probado por la investigación de los efectos del masaje en bebes prematuros. Los bebés que han sido masajeados habitualmente, crecen más rápido y pesan más.
Durante los primeros meses de vida, el bebe corrige su posición fetal estirando sus músculos y aprendiendo a controlar sus movimientos. El masaje estimula la coordinación y flexibilidad de los músculos. Lo cual también favorece la circulación sanguínea, regula el ritmo cardiaco y respiratorio y activa el metabolismo.
El majase puede ayudar al bebé a volverse más alerta y más sociable a medida que crece; además le ayuda a relajarse, al reducir las hormonas del estrés. Por eso, suele lograr un sueño más largo y profundo. Aquí te presentamos los pasos para realizar un masaje relajante para bebés:
Primero, prepara con antelación la sesión de “masaje”. Elige un sitio de la casa que sea tranquilo, con luz y temperatura agradables. Es aconsejable poner música de “ambiente relajante” para crear un entorno apacible. Asegúrate de que tienes todo lo que necesitas a mano para no tener que interrumpir el masaje. Empezamos:
Tómate el tiempo necesarios para concentrarte completamente en tu bebé, apaga el teléfono móvil (descuelga el teléfono fijo, si hace falta, etc…) y deshazte de cualquier pensamiento o preocupación que te distraiga. (Céntrate en el masaje que vas a realizar a tu pequeñín).
- Cubre las partes del cuerpo del bebé que no estés masajeando, para evitar que se enfríe.
- Háblale suavemente a tu bebé, pero no constantemente; él también disfruta de la paz y la tranquilidad durante el masaje.
- Precalienta unas gotas de aceite para masaje frotándolo con las manos (puedes usar aceite de caléndula de Welleda para bebés).
- Empieza con caricias suaves pero firmes, para que tu bebé no sienta cosquillas que le puedan molestar y se acostumbre al movimiento de tus manos sobre su piel (toma especial cuidado en las zonas sensibles a las cosquillas como pies, bajo brazo, axilas, barriga, etc…).
- Se puede practicar un masaje al bebé después de la primera semana de nacido. Al principio debe durar solo algunos minutos, incrementando el tiempo hasta 20 minutos como máximo, a partir del mes de edad.