En varias ocasiones ya hemos hablado sobre la importancia de la alimentación a la hora de prevenir enfermedades graves. Los hábitos que mantengamos ahora y la forma en que nos alimentamos influirá enormemente en nuestra salud futura. Debido a esto resaltamos siempre la importancia de cuidar lo que comemos. Hoy vamos a hablar sobre un se estudio que se hizo sobre el alzheimer y como con la ayuda del colesterol bueno podemos evitarlo.
Este estudio abarcó a 1.130 personas de nacionalidad hispana, el mismo analizó cuan propensas eran las personas que tenían el colesterol bueno (HDL) alto a contraer distintas enfermedades, como es el caso del alzheimer. El estudio mostró como los mayores de 65 años con las cantidades más altas de HDL eran un 60% menos propensos a desarrollar la enfermedad. En este no pareció importar si los pacientes consumían las grasas buenas de forma natural o a través de compuestos, ya que los resultados seguían siendo los mismos. Además, el estudio se centró especialmente en personas con mayores probabilidades de sufrir de esta enfermedad u otras enfermedades similares.
Por otro lado, además de registrar mediciones del colesterol bueno, también se hicieron otras, como por ejemplo, el colesterol total y el LDL y las grasas sanguíneas denominadas triglicéridos. ¿Qué se concluyó a partir de esto? Que el efecto de los mismos parece ser aislado del HDL, por tanto, más allá de si tenes el LDL alto o bajo, lo que importa es tener el HDL alto. Además, había otras factores que sí ayudaban a disminuir el riesgo de Alzheimer, como por ejemplo el ejercicio, y nutrientes como la vitamina B, la cual puede mejorar un 25% los niveles de HDL, aunque no es muy usada por algunos efectos colaterales incómodos.
Esos alimentos son muy aconsejables
- Las frutas y verduras, en especial las de tonos intensos u oscuros. Entre las verduras con mayor capacidad preventiva se citan las espinacas, las coles de Bruselas, el brócoli, la remolacha, los pimientos, las berenjenas, las cebollas moradas… Entre las frutas, destacan las pasas, ciruelas secas, moras, uvas negras, fresas, cerezas, arándanos…
- Los pescados azules, ricos en ácidos grasos omega-3. Atún, caballa, salmón sardinas, chicharro, boquerones, trucha… son una maravillosa fuente de grasas protectoras.
- Los frutos secos, ricos también en aceites protectores y en vitamina E. Almendras, nueces, avellanas y pacanas son especialmente recomendables.
- Cantidades adecuadas de aceite de oliva virgen para cocinar. El aceite de oliva virgen aumenta los niveles de colesterol HDL (el “bueno”, que ayuda a eliminar el colesterol “malo” o LDL) y protege las neuronas.
- Especies como la cúrcuma, presente en el curry (su consumo parece evitar la formación de las placas características del Alzheimer en el cerebro; de hecho, la India, el país donde más curry se consume, es el que menos incidencia de Alzheimer tiene en el mundo).
- Algunas vitaminas. Varios estudios sugieren que las vitaminas E y C tomadas conjuntamente, y también la vitamina B12 y el folato podrían ayudar a prevenir el Alzheimer. Una dieta variada puede asegurarnos dosis suficientes de esas vitaminas y de los oligoelementos necesarios para que el organismo las utilice eficazmente.
Por tanto, como siempre recomendamos, es bueno tener el nivel de colesterol bueno alto, y como vimos hoy, esto no solamente nos ayudará a cuidar de la salud de nuestro corazón sino que también a prevenir enfermedades de distinta índole.