La manzanilla se utiliza para diversos problemas estomacales como las náuseas, los vómitos y la acidez. La manzanilla es buena para los dolores estomacales, la pesadez estomacal, la gastritis, problemas respiratorios, bronquitis, dolores menstruales También es muy común que sea consumida por personas con problemas de ansiedad, ya que es un sedante medio.
A menudo se utiliza en pacientes con cáncer, a modo de enjuague bucal para evitar los dolores causados por la quimioterapia. Se utiliza para tratar la diarrea en niños, las hemorroides y el insomnio.
Las mujeres lo utilizan a menudo para aliviar los dolores menstruales por sus propiedades antiespasmódicas y antiinflamatorias.
El aceite de manzanilla tiene propiedades antibacterianas, especialmente si se combina con el tomillo, la equinácea o el sello de oro. Se puede utilizar para infecciones internas y externas.
Calmante. Quizá el uso más popular para la manzanilla es como calmante. En forma de té y aceite para quemar (aromaterapia) se usa frecuentemente para relajación. Tomarse un agua de manzanilla antes de una sesión de meditación, ayuda a crear un estado relajado. Igualmente, quemar aceite de manzanilla durante sesiones de meditación, yoga o de alguna terapia de sanación, aumenta los beneficios de estas prácticas.
Insomnio. Por su efecto calmante y relajante, muchos encuentran que un té de manzanilla antes de acostarse los ayuda a dormir más profundamente, al igual que sesiones de aromaterapia con esta planta.
Regulador del estado de ánimo. Por su efecto calmante, algunas personas recomiendan té de manzanilla, esencia floral o aceite de manzanilla para tratar personas que tienden a la irritabilidad, hiperactividad y el mal genio. Al mismo tiempo, la manzanilla también se ha encontrado efectiva para personas con síntomas depresivos.
Cólicos. En un estudio Británico, investigadores encontraron que aquellos individuos que consumían té de manzanilla presentaban un nivel elevado de glicina, un aminoácido relacionado con importantes funciones como el tono muscular, movimiento y coordinación y sistema inmune, entre muchos otros. La glicina, sobre todo, regula en parte los espasmos musculares y para aquellas mujeres que sufren de cólicos menstruales – o todo aquel que tenga espasmos musculares – consumir manzanilla puede elevar los niveles de glicina, y por lo tanto contribuir a la relajación muscular que alivia dichos cólicos. Adicionalmente, algunos estudios han mostrado que la manzanilla tiene efectos anti-inflamatorios, lo cual también ayuda en el caso de cólico.
Para infusión, la aplicación más popular de la manzanilla, toma una taza de infusión estándar de las flores como digestivo suave y para el insomnio. Es una hierba suave que se puede utilizar también con niños en dosis reducidas. También se puede aplicar en inhalaciones o vapores añadiendo 10 ml (2 cucharadaditas) de flores o 5 gotas de aceite esencial en un tazón de agua hirviendo para combatir la fiebre del heno o el asma leve.
Como crema, ungüento o loción, la manzanilla sirve para aliviar las molestias al aplicarse sobre picaduras de insecto, heridas o eczemas. Se utiliza también para tintura, para lo que se toman 10 ml (2 cucharaditas) de tintura de las flores 3 veces al día para el síndrome del intestino irritable o la tensión nerviosa.
Si se utiliza para enjuagues, se agregan 4-5 gotas de aceite esencial al agua para lavar las heridas o calmar la piel. Con 1 taza de infusión esencial colada en el agua del baño del bebé por las noches, le ayudarás a conciliar el sueño.
Otro modo de aplicación es en forma de gargarismos o como colutorio, para lo que hay que añadir 10 ml (2 cucharaditas) de tintura a un vaso de agua caliente, o 1 taza de infusión estándar para las encías inflamadas y los problemas bucales o para gargarizar en caso de dolor de la garganta.
Cuidado de la piel. Las lociones de manzanilla (sobre todo las que no contienen alcohol ni aditivos artificiales) se han encontrado útiles en el tratamiento de condiciones de la piel como eczema y soriasis. Por sus cualidades anti-inflamatorias y antibacteriales, la manzanilla ofrece alivio temporal en estos casos, al igual que para el acné, quemaduras de sol y caspa.
Gripe y resfriados. Por sus beneficios anti-inflamatorios y antihistamínicos, la manzanilla es usada por muchos en época de resfriados para prevenir y tratar síntomas como estornudos y congestión nasal. Ya sea en forma de té o como aromaterapia, la manzanilla alivia temporalmente los síntomas molestos de la gripe.
Indigestión. Por sus beneficios anti-inflamatorios y calmantes del sistema nervioso, la manzanilla es para muchos un alivio para dolores de estómago, cólicos intestinales y diarrea. Tomarse un té de manzanilla, sobre todo combinado con canela, después de cada comida previene en gran parte la indigestión.
mas usos de la manzanilla:
cualidades de esta planta están:
1- Es un antinflamatorio. Ayuda a aliviar los procesos de inflamación tanto tomándola o usándola externamente.
2- Tiene propiedades antimicrobianas y funguicidas
3- Se le utiliza para hacer gárgaras cuando hay problemas de garganta y de encías
4- Ayuda con la cicatrización
5- Ayuda con problemas digestivos
6- Es calmante y tranquilizante, actúa como un sedante suave. Se le usa en caso de irritabilidad, tristeza y ansiedad.
7- Ayuda a controlar el eczema y las hemorroides
8- Facilita la menstruación y ayuda a eliminar sus molestias
9- En cosmética se le usa para aclarar el pelo, descongestionar la piel y calmar irritaciones
10- Es un diurético suave
11- Ayuda con la gota, artritis y sinusitis
12- Ayuda con problemas de asma y gripes
Precauciones cuando se usa la manzanilla
La manzanilla, usada como bebida o tópico, puede tener interacciones dañinas con algunas drogas o condiciones físicas.
Particularmente, no debe tomar o usar productos con manzanilla si está siendo tratado por problemas de coagulación o está tomando la droga heparina (u otro anticoagulante), pues existe el riesgo de sangrado interno.
Igualmente, tomar manzanilla con aspirina o con drogas antidepresivas también puede provocar reacciones perjudiciales en el organismo.
Es importante que si usted está bajo tratamiento médico, pregunte a su doctor primero si puede usar productos o bebidas de manzanilla. Una interacción puede ser fatal.
Se recomienda también que las mujeres embarazadas y lactantes se abstengan de usar manzanilla.