Nuestra dieta puede evitar el Alzheimer
Las enfermedades se pueden evitarse, retrasarse o acelerarse dependiendo, también, de nuestra nutrición y alimentación. Un reciente estudio ha revelado cómo nuestra dieta puede evitar en cierta manera el desarrollo del Alzheimer.
Dietas ricas en Omega 3 evitan el Alzheimer
Las personas con dietas altas en ácidos grasos omega 3 y vitaminas C, D, E y vitaminas del complejo B también obtienen mayores puntuaciones en las pruebas mentales que las personas con dietas bajas en alimentos que contienen estos elementos. Los ácidos grasos omega 3 y la vitamina D se encuentran principalmente en el pescado; mientras que la vitaminas B y los antioxidantes C y E se encuentran principalmente en frutas y verduras.
El estudio también demostró que las personas con dietas altas en grasas trans son más propensas a sufrir una reducción del volumen cerebral y tienen puntuaciones más bajas en las pruebas mentales y de memoria que las personas con dietas bajas en grasas trans. Las grasas trans se encuentran principalmente en la comida rápida, los fritos, los congelados, los productos de panadería y la margarina.
En el estudio participaron 104 personas con una edad media de 87 años y pocos factores de riesgo de padecer problemas cognitivos. Se utilizaron análisis de sangre para determinar los niveles de diversos nutrientes en cada participante; a los que también se sometió a exámenes de memoria y habilidades cognitivas. También se realizó una resonancia magnética a un total de 42 participantes para medir su volumen cerebral. En general, los participantes tenían un buen estado nutricional, pero el siete por ciento tenía deficiencia de vitamina B12, y el 25 por ciento deficiencia de vitamina D.
Según lo que ha publicado la revista Neurology, las personas con dietas altas en ácidos grasos omega 3 así como vitaminas C,D,E son menos propensas a sufrir la contracción del cerebro que se asocia con esta enfermedad mental.
Además, este estudio comprobó que la gente que no llevaba a cabo una dieta equilibrada, basada en grasas trans, tenía propensión a sufrir una reducción del volumen del cerebro, con el consiguiente perjuicio en nuestra salud y bienestar.
En el mismo estudio, y tal y como decíamos la semana pasada, también se ha descubierto que se puede conocer si una persona padece la enfermedad de Alzheimer por los biomarcadores de la sangre. Pequeños pasos que en unos años pueden significar un gran avance contra esta enfermedad mental que tando daño causa a los que la padecen y a sus familias.
Sugerencias para prevenir la pérdida de la memoria :
1. seguir una dieta baja en grasas;
2. realizar actividad física;
3. mantener la estimulación mental;
4. reducir el estrés;
5. ingerir alimentos con vitaminas del complejo B;
6. consumir pescado y aceite de oliva;
7. hacer uso de los poderes terapéuticos del ginkgo biloba;
8. realizar tratamientos con estrógenos;
9. tener ?saludables relaciones? con las personas
Bajar el colesterol y la presión sanguínea
Una investigación realizada por el doctor Hugh Hendrie, profesor de la Escuela de Medicina de la Universidad de Indiana, indica además que otros factores, además de los genéticos, como la alta presión sanguínea, el exceso de grasas y los altos niveles de colesterol, aumentan el riesgo de demencia o mal de Alzheimer entre dos y dos veces y media.
Es sabido que el bajo colesterol y la baja presión previenen la aparición de enfermedades cardíacas pero desconocíamos que el aumento del colesterol pudiera significar un factor de riesgo para la enfermedad de Alzheimer. Esto se debería, según los estudios, a la destrucción de células nerviosas en el cerebro.
Es posible concluir, entonces, que lo que resulta malo para el corazón lo es para el cerebro. Es necesario prestar atención a los factores de riesgo asociados a enfermedades cardíacas para evitar también el mal de Alzheimer. Así como recurrir a la misma prevención: el consumo de antioxidantes como las vitaminas A, C y E, los medicamentos antiinflamatorios y el ejercicio, aseguran los expertos.
Mantenerse mental y físicamente activos
La pérdida de la memoria, la lentitud en los procesos del pensamiento y los bloqueos no son inevitables si el cerebro permanece activo y estimulado.
Así como el ejercicio ayuda al corazón a mantenerse saludable, la actividad mental como la lectura, los juegos de ingenio y las palabras cruzadas permiten ejercitar al cerebro y evitan su deterioro.
También el cuidado del cuerpo a través del ejercicio físico y la dieta adecuada son importantes para mantener la salud de la mente.
Probablemente la demencia sea el resultado de la pérdida de las sinapsis que son parte del delicado sistema utilizado por las células cerebrales para transmitir información a todo el cuerpo. Cuanto mayor sea la cantidad de sinapsis que sea posible desarrollar a través de actividades de estimulación intelectual, menor será la pérdida al enfermar.
Permanecer mentalmente activos es una de las claves para conservar la salud y protegerse a sí mismo contra el mal de Alzheimer. Todo depende de algunos cambios en el estilo de vida. Es hora de comenzar.