Una de las excelentes maneras que tienes a mano para combatir la piel grasa es recurriendo a la patata. Este vegetal tiene fuertes propiedades astringentes, razón por la cual puede ser empleado tranquilamente para reducir la grasitud del cutis, cerrar poros y evitar que la suciedad se acumule en ellos. Así es como puedes preparar una mascarilla casera, combinando los ingredientes adecuados.
Ingredientes:
- Una patata hervida
- Dos cucharadas de leche
- Miga de pan remojada en leche
- Zumo de limón
Preparación:
Hierve la patata (preferentemente con su piel) y luego realiza un puré bien liso, sin grumos. Añade allí la miga de pan remojada previamente en leche y bien deshecha, además del zumo de limón y la leche. Tritura bien hasta que te quede una pasta homogénea.
Luego simplemente restará la aplicación de la mascarilla. Bastará con distribuirla sobre las zonas del rostro (u otras partes de la piel), dejando actuar durante unos 15-20 minutos. Para retirarla, bastará que apliques agua fría, ideal para que los poros no queden abiertos.
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