Algo que tienen en común los antibióticos, esteroides y dietas altas en carbohidratos es el peligro que representan para nuestra salud, y el riesgo que poseen de causar una infección denominada Candidasis (infección de la zona genital, que acarrea complicaciones como fatiga, migrañas, problemas digestivos y cognitivos).
Esta infección es causada por un sistema inmunológico débil. El sistema inmune yace en su mayoría en nuestro tracto digestivo, ya que es allí donde se encuentran la mayoría de las bacterias en nuestro cuerpo. Las cantidades de bacterias en nuestro cuerpo deben mantenerse en perfecto equilibrio para que gocemos de salud, y es allí donde los antibióticos entran en la ecuación.
El uso frecuente o prolongado de antibióticos destruye tanto las bacterias malas como las buenas de nuestro organismo, pero dejan las causantes de la Candidasis vivas, intactas y sin competencia, un sistema ideal para la reproducción y avance por el cuerpo, y es allí donde ocurren las infecciones.
Por otro lado, los esteroides causan serios problemas con el sistema inmune, sobre todo para quienes abusan de ellos. La bacteria causante de la Candidasis puede ingresar al torrente sanguíneo, causando complicaciones que ponen en peligro nuestra propia vida.
Según expertos, las personas que consumen esteroides corren el riesgo de experimentar sangrado en la nariz, calambres, dolores de cabeza, disfunción hepática, insensibilidad a la insulina producida por su propio cuerpo, trastornos en la glándula tiroides e incluso depresión.
Entre los hombres, se ha dado el caso de que les ha crecido tejido mamario en los pechos.
Asimismo, hay personas que cuando empiezan a tomar esteroides orales, sienten náuseas, vómitos, diarreas o bien estreñimiento.
Otros signos de abuso de estas sustancias pueden ser calvicie prematura y cambios en el estado de ánimo y en la agresividad y recrudecimiento del acné.
También puede ocurrir retención de líquidos, lo cual puede provocar un aumento en la presión sanguínea.
El abuso de esteroides también puede perjudicar el corazón.
Busca otras opciones
Lo más sano es que evites su consumo y no te desesperes si tus músculos no crecen a la velocidad que tú deseas.
Conversa con un entrenador y tal vez él pueda darte la solución acerca del desarrollo muscular y del incremento en la resistencia.
Lo cierto es que muchos jóvenes inclinados a deportes, como el fútbol americano, la natación, el atletismo y el físicoculturismo, tienden a usar esteroides.
Asimismo, hay adolescentes que los ingieren para apresurar el proceso de madurez de sus cuerpos.
En el mundo del modelaje es frecuente ver a personas de ambos sexos recurrir a estas hormonas para mejorar sus cuerpos y aumentar sus energías.
En cuanto a las mujeres -los casos no son tan frecuentes como en los hombres, pero los hay-, la menstruación se altera o dejan de menstruar; les cambia la voz y les crece el bigote, tal y como les sucede a los chicos durante la pubertad.
A nivel emocional los adictos a los esteroides (más temprano que tarde su consumo se vuelve vicio) se vuelven muy irritables y violentos, con delirios de persecución y otras ideas negativas que los pueden llevar a cometer suicidio.
Ya que estos dañinos productos suelen circular con gran facilidad entre los deportistas y asiduos al gimnasio, siempre hay que consultar a un médico antes de tomar cualquier producto que nos ofrezcan, si es posible evitándolos desde el comienzo.
Cada cuerpo es distinto y también reacciona de manera diferente a las sustancias que ingiere. Lo único que puede garantizar un óptimo desarrollo físico es una dieta y entrenamiento personalizados, acompañados de mucho esfuerzo y disciplina. Al final nuestra salud será la que nos muestre los resultados.