Los deportes para niños hiperactivos, son muy buenos para ellos, ya que pueden centrar su atención a una actividad física y descargar toda su energía a través de ella; destacando que los niños que tienen hiperactividad generalmente no consiguen concentrarse en ninguna actividad, ya que no están quietos y se mueven constantemente de un lado a otro. El trastorno por déficit de atención o hiperactividad, se caracteriza por un exceso de actividad e impulsividad y por tener un déficit de atención; por eso los niños diagnosticados con esta condición, se distraen fácilmente, son descuidados con sus tareas diarias y muchas veces no tienen un buen rendimiento en la escuela, lo que se puede mejorar gracias al deporte.
El deporte es entonces una vía terapéutica para los niños, ya que pueden ejercitar su autocontrol al alcanzar un objetivo determinado. Pero para saber cuál es el mejor deporte para ellos, es necesario considerar que los niños hiperactivos poseen una gran potencia muscular, flexibilidad y agilidad; pero no son buenos con su coordinación visomotora, donde actividades como bailar, dibujar, escribir y saltar no las logran con facilidad, por eso es fundamental saber qué actividad elegir para ellos.
Deportes para niños hiperactivos beneficios y recomendaciones
Los deportes para niños hiperactivos que son más recomendados, son aquellos individuales, como es el caso de la gimnasia, natación, artes marciales, tenis, ciclismo, kárate, yudo y taekwondo; los deportes en grupo no son recomendables porque es difícil captar su atención cuando existen más participantes en la actividad, aunque con la ayuda de un buen entrenador siempre todo es posible, además de contar con la ayuda de los padres. Por eso cuando se pretende introducir al niño en un deporte o disciplina, lo recomendable es entregar instrucciones cortas y concisas, destacando siempre los aciertos para dejar los errores en un segundo plano; siendo siempre empáticos con ellos y entregándoles la confianza de que cada día se podrá mejorar en la actividad que está realizando.
Pero sin duda que uno de los deportes para niños hiperactivos que más se recomienda, es la natación, ya que los movimientos constantes de esta actividad física mantienen controlada la excesiva energía del niño, además de ser un deporte que requiere de una disciplina, ayudándolo así a autocontrolarse. Donde sin duda un claro ejemplo de lo efectiva que es la natación en los niños con hiperactividad, es el nadador Michael Phelps quien fue diagnosticado con hiperactividad desde los 9 años y se centró en la natación para controlar sus impulso, convirtiéndose luego en un nadador medallista de diversas olimpiadas, con un éxito indiscutible.
Sin duda que uno de los mayores beneficios del deporte en los niños, es que se logra una disciplina diaria que los ayuda a autocontrolarse, existiendo pocas oportunidades para distraerse, ya que enfocan toda su atención en la actividad que están desarrollando. Pero esto no es todo, ya que gracias al deporte, logran relajarse y además dormir mucho mejor, adquiriendo con el paso del tiempo, un estado mucho más tranquilo; evitando pasar tiempo junto a la televisión o vídeo juegos, actividades que no ayudan a tratar su hiperactividad.
El ambiente familiar es fundamental para ayudar a niños hiperactivos
Si bien los deportes para niños hiperactivos son muy beneficiosos para ellos, también se pueden seguir otros consejos a nivel familiar, para ayudarlos. Ya que el rol de los padres es fundamental para su recuperación representando para ellos una fuente de seguridad absoluta; por eso lo ideal es lograr un ambiente familiar estructurado, siendo fundamental que los padres mantengan un orden y no se alteren con facilidad; ya que muchas veces la hiperactividad es hereditaria y uno de los padres desarrolla esta misma condición.
Lo importante es ayudar y motivar al niño cuando es hiperactivo y no regañarlo u obligarlo a hacer algunos deberes, por ejemplo si el niño es muy lento para vestirse por las mañanas para ir a la escuela, lo ideal es que se le despierte 15 minutos antes y así ayudar a que el ambiente familiar sea más relajado. Además en el caso de realizar un viaje largo en coche o estar en una sala de espera, se pueden portar lápices y libros de colores, para mantener su atención enfocada en esta actividad; destacando que cuando muestre mejoras en su comportamiento y siga algunas instrucciones se le debe motivar a seguir haciéndolo.
Además al realizar su tarea escolar, lo recomendable es que los padres los acompañen ya que tienen una mayor dificultad para enfocarse en esta labor, pero con la ayuda de sus padres esto puede ser más fácil.