El desamor deja profundas heridas a nivel emocional. ¿Cómo es posible superarlo y tener una buena calidad de vida en pleno proceso de duelo?
1. En primer lugar, asume que es normal estar mal, es un periodo de tristeza y de pérdida. Siempre que se pierde a una persona, entonces, surgen las heridas y el poder del vacío. Incluso, cuando eres tú quien rompe una relación de forma voluntaria, es preciso hacer frente a un proceso de duelo.
2. No tengas miedo del futuro. Es decir, no conviertas en un drama la soledad. Sencillamente, lo que tenga que ser, será. Tal vez, dentro de unos años conozcas a esa persona realmente especial para ti. De momento, céntrate en tu bienestar, disfruta de la soledad, cuida de tus amigos e intenta estar ocupado. No te quedes encerrado en casa todo el día llorando porque así, no se soluciona nada. Al revés, el malestar se agrava al compás de la autocompasión.
3. Desahógate con alguien de confianza, habla sobre cómo te sientes, intenta ser feliz incluso, en el dolor. Es decir, busca un sentido positivo a la situación, algo que puedas aprender.
4. Detrás de una ruptura existen causas que deben ser analizadas. Muchas veces, la relación ya estaba rota desde hace tiempo pero existen personas que se autoengañan, es decir, miran hacia otro lado más allá de la tristeza.
5. Descansa bien cada día, aliméntate de una forma saludable e intenta buscar la calma. Realiza ejercicio físico.
El arte de vivir depende, únicamente, de ti.
El desamor deja heridas, pena, tristeza, sensación de haber perdido el tiempo, rencor, decepción y rabia. Mucha rabia. ¿Cómo curar el desamor de una forma efectiva? En primer lugar, intenta vivir el presente sin pensar en el futuro. ¿Por qué? Porque en caso de hacerlo verás el mañana en negativo. Puede que empieces a dar vueltas a la cabeza, a creer que nunca volverás a enamorarte, que nadie se fijará en ti… Evita este tipo de pensamientos que te restan energía.
Además, evita pensar en el futuro sentimental. Todo aquel que está en un momento de desamor debe de dar prioridad a la amistad para centrarse en este ámbito de la vida. Para olvidar a un amor es bueno hacer planes con los amigos, quedar, tener la mente ocupada, hacer actividades el fin de semana, hacer deporte, evitar ver películas románticas y escuchar música triste…
No hay que recrearse en el dolor sino intentar superar la tristeza a través de la actitud. Piensa en todas las cosas buenas que puede traerte tu nueva situación. A lo mejor, ha llegado el momento de cumplir aquellos sueños que siempre quisiste hacer porque es la hora de centrarte en ti mismo. Vive y sé feliz porque la vida es breve y el tiempo pasa más rápido de lo que parece a simple vista.
Pero en cambio, cuando estás triste y amargado el tiempo se hace eterno. Sonríe aunque no tengas ganas. En la medida en que aprendas a forzar este gesto, entonces, también podrás ser más receptivo hacia la alegría. El desamor no es una enfermedad, tampoco una tragedia, es una situación vital inevitable. Y es que, también viven una etapa de desamor aquellos matrimonios felices que en determinado momento hacen frente al duelo de la pareja.
Es evidente, que un amor no correspondido también duele, por ello, rompe todo contacto con esa persona, mata cualquier esperanza de reencuentro y sigue con tu vida. Intenta ver la soledad con un sentido dramático. La verdadera soledad está dentro de uno mismo. Por ello, cuanto más te recrees en tu dolor, más hundido te sentirás.
Para curar un desamor es importante dar las gracias. Por los momentos compartidos que se han vivido junto a la otra persona. Siempre hay cosas buenas pero en el momento amargo del adiós se pierden de vista esos matices tan bonitos. Recuerda el primer beso, la primera cita, la ilusión de los inicios…
No te compares con nadie. Evita observar a aquellas personas que parecen felices junto a su pareja.
1. Comparte tus sentimientos.
Algunas personas encuentran que el hecho de compartir sus sentimientos con alguien de confianza -alguien que se haga eco de lo que están pasando- les ayuda a sentirse mejor. Esto puede implicar expresar todo lo que sientes, e incluso llorar en el hombro de un buen amigo o familiar y dejar que éste te consuele. A otros les ayuda más salir de casa y hacer aquellas cosas que normalmente disfrutan haciendo, como ir al cine o a un concierto, para desconectar del sufrimiento. Es posible que la gente, con sus mejores intenciones, no entienda la profundidad de tus sentimientos e intente animarte con afirmaciones como “lo superarás” o “ya conocerás a otra persona”. Probablemente esas personas están intentando ayudarte de la única forma que saben. Pero, si tienes la sensación de que determinada persona es incapaz de entender por lo que estás pasando o intenta minimizar tus sentimientos, habla con alguien que te entienda mejor.
2. Cuídate.
Tener partido el corazón puede ser muy estresante, de modo que no permitas que interfiera con tu ritmo de sueño: tu cuerpo necesita descansar para reponerse. Duerme mucho, come alimentos saludables y haz ejercicio regularmente para reducir el estrés y los sentimientos depresivos, e intente elevar tu autoestima.
3. Piensa en todas las cosas buenas que tienes.
A veces las personas que tienen partido el corazón se echan las culpas por lo ocurrido. Pueden ser muy duras consigo mismas, exagerando sus faltas como si hubieran hecho algo para merecer el sufrimiento que están experimentando. Si te das cuenta de que te está ocurriendo esto, ¡corta de raíz! Recuérdate las cualidades que tienes y, si no se te ocurre ninguna porque el dolor te ofusca la mente, pide a tus amigos que te ayuden a recordar todas las buenas cualidades que tienes.
4. Mantenerte Ocupada.
Puede costarte bastante cuando estés sumido en la tristeza y dominado por el sentimiento de pérdida, pero ayuda mucho. Es un buen momento para redecorar tu habitación o probar una nueva afición (hobby). Esto no significa que no debas pensar en lo ocurrido -reflexionar sobre lo que nos ha sucedido forma parte del proceso de curación – sino que también debes centrar tu atención en otras cosas.
5. Tener paciencia y darte tiempo.
Para superar la tristeza hace falta tiempo. Casi todo el mundo cree que nunca se repondrá completamente, pero el espíritu humano es sorprendente -y los males de amores casi siempre se curan al cabo de un tiempo. Pero, ¿cuánto tardarás en superarlo? Eso dependerá de qué fue lo que te partió el corazón, cómo afrontaste la pérdida y con qué rapidez tiendes a recuperarte de las experiencias. Recomponer un corazón roto puede costar sólo unos días o muchas semanas – y a veces incluso meses.
Algunas personas sienten que nunca volverán a ser felices y se refugian en el alcohol o las drogas. Otros se enfadan muchísimo e intentan hacerse daño o hacer daño a otras personas. Las personas que empiezan a beber, a consumir drogas, o a autolesionarse para evadirse de la realidad de la pérdida pueden creer que están mitigando el dolor, pero se tratará de un alivio meramente temporal. Esas personas no están afrontando realmente su dolor, sino tan sólo enmascarándolo, lo que hará que sus sentimientos crezcan en su interior y, a la larga, prolongará su sufrimiento.
A veces la tristeza es tan profunda -o dura tanto tiempo- que la persona necesita ayuda profesional para reponerse. Para aquellas personas que al cabo de unas semanas no se empiezan a encontrar mejor o siguen estando deprimidas, puede ser de gran ayuda hablar con un profesional de la salud mental o psicoterapeuta.