Muchos de nosotros, en algún momento de nuestras vidas, descubrimos que aparecen en nuestra piel unos pequeños granitos. Especialmente en la cara que es la parte del cuerpo que siempre esta visible y que normalmente vemos al mirarnos en un espejo.
Estas pequeñas imperfecciones de la piel son llamadas barros y espinillas y pueden ser tan pequeñas que apenas si podemos descubrirlas. Para eliminar barros y espinillas hay que evitar a toda costa romperlos apretando con los dedos o las uñas, lo único que se consigue con esto es lastimar nuestra piel.
Nunca hay que tocarse la cara, si rompemos los granitos nosotros mismos empeoramos la situación ya que, aunque se logre extraer el grano, estaremos extendiendo el sebo por la zona y el tejido queda dañado por lo que seguramente se desarrollarán otros barros o espinillas alrededor.
Para eliminar barros y espinillas lo ideal es hacer una visita a un dermatólogo para que nos de un diagnóstico y nos brinde un tratamiento eficaz para cada caso en particular, pero a veces no se tienen los medios suficientes para seguir este tipo de tratamientos. Por eso hoy daremos algunos consejos que pueden resultar de gran ayuda.
En primer lugar se debe evitar tocarse la cara para evitar infecciones, hay que desinfectar bien las manos y lavarse la cara dos veces diarias con algún jabón especial para acné. Existen varios tipos de jabones para acné, aquel que elijamos debe ser el indicado para nuestro tipo de piel.
Tenemos muchas recetas caseras para eliminar el barro y espinillas. Una de las mejores se prepara con el zumo de un limón, mezclado con una cucharada de bicarbonato de sodio. Se mezcla bien hasta que quede como una crema.
Esta crema se aplica masajeando sobre el rostro durante unos dos minutos, se debe aplicar inmediatamente después de lavarse la cara con agua fría y se quita de la misma manera.