Muchas veces nos sentimos avergonzados de mostrar nuestros dientes, principalmente por el miedo a que estos no son blancos y que no sean del agrado de los demás. Debido a este tipo de problemas, muchas personas piensan que el utilizar bicarbonato y limón para los dientes puede ser la gran solución para tener un sonrisa radiante, sin embargo, ¿es recomendado realmente este tratamiento?
Bicarbonato y limón para los dientes
Antes de analizar el tema del bicarbonato y limón para los dientes, debemos señalar que hay múltiples factores que manchan los dientes, por ejemplo, el beber café con regularidad, el fumar, falta de lavado, etc. Si este fuese nuestro caso, debemos considerar que los dientes no volverán a su color natural de manera tradicional, principalmente porque se genera una mancha en el esmalte, una mancha que debe ser retirada. Para esto, hay un buen número de maneras para hacer que nuestros dientes sean más blancos, la más habitual, es el visitar a un dentista y optar por procedimientos como el pulido de los dientes, tiras blanqueadoras, etc. Sin embargo, también se puede optar por los remedios caseros para blanquear los dientes, aunque estos remedios caseros, muchas veces pueden traer mayores problemas si no son utilizados de buena manera, además de que los resultados pueden variar.
Bicarbonato y limón para los dientes: Esta combinación es un popular remedio casero para conseguir dientes blancos, debido a que el bicarbonato de sodio se considera como un agente abrasivo el cual es suave y logra desintegrar la placa bacteriana, así como el sarro que se puede desarrollar en el esmalte de nuestros dientes. Debido a que este producto se suele disolver en gua, puede alcanzar todas las regiones de los dientes.
Por el lado del limón, este cuenta con una naturaleza ácida, por lo que es capaz de romper los residuos de los alimentos que se pueden quedar pegados en nuestros dientes.
La manera de utilizar el bicarbonato y limón para los dientes, es mezclando un poco de bicarbonato de sodio, junto con el jugo de limón para generar una pasta. Para aplicar esta pasta, se deberá utilizar un cepillo de dientes de consistencia suave. Tras un minuto de uso, se deberá enjuagar nuestra boca.
Mientras que veremos nuestros dientes más blancos con el uso de esta mezcla, debemos conocer que esto no es recomendado, principalmente porque se pagara un alto precio en la salud del diente. El bicarbonato de sodio, así como el limón, pueden debilitar nuestros dientes, removiendo de cierta manera el esmalte natural. Además, el efecto de blanqueado estéticamente, en realidad es producto de que el limón y el bicarbonato manchan los dientes con un color blanco, por lo que realmente tendríamos dientes blancos pero manchados, además de ser dientes muy débiles. Este tipo de procedimiento puede generar sensibilidad a alimentos fríos o calientes y en el peor de los casos, hasta se puede quebrar el diente.
Por ende, a pesar de que estéticamente puede ser una solución, hay que tener en mente las siguientes recomendaciones.
El bicarbonato y limón para los dientes puede ser beneficioso si estamos en la búsqueda de una solución meramente estética, por lo que si decidimos recurrir a este remedio casero, nunca se deberá abusar de la mezcla.
Debido a que el bicarbonato cuenta con un efecto abrasivo, el cual si es utilizado con demasiada frecuencia o en cantidades elevadas, puede dar como resultado en una erosión en el esmalte de los dientes. También se debe considerar que las personas que cuentan con problemas en las encías, así como dientes sensibles solo aumentarían sus problemas si recurrieran a esta mezcla.
También hay que considerar que el generar un cepillado con bicarbonato de sodio puede ayudar a eliminar la placa bacteriana en cierto grado, aunque su efecto no es exactamente equivalente a lo que nos puede ofrecer un agente desinfectante profesional. Por lo que necesitaremos utilizar una enjuague bucal antibacterial para realmente generar una limpieza.
Finalmente y tras leer todas las recomendaciones y riesgos de esta mezcla, si aún se quiere recurrir al tratamiento estético, se debe procurar que cuando se mezcle el bicarbonato de sodio con nuestra pasta de dientes, este sea utilizado solo en pequeñas cantidades, debido a que algunas marcas de crema dental también contienen agente abrasivos y el bicarbonato aumentaría ese efecto, lo que es perjudicial para la salud del diente.