Se conoce como Hierba de Aquiles a la Achillea millefolium, tambien conocida como milenrama es una planta que podemos encontrar con frecuencia en estado silvestre tanto en el continente europeo como en Norteamérica. Esta planta (al igual que casi todas de las del género Achillea) tiene múltiples propiedades, y hoy repasaremos los beneficios de la hierba de Aquiles para que puedas aprovecharla.
Hace varios cientos de años, cuando la medicina convencional no estaba del todo desarrollada, la hierba de Aquiles se utilizaba para curar todo tipo de heridas. Lesiones, llagas, úlceras e inflamaciones se buscaban reducir y curar con la aplicación de esta planta; hoy en día los medios con los que contamos son otros más eficientes, pero no por ello la planta se ha dejado de utilizar con muchos propósitos medicinales.
Por ejemplo, con ella se pueden tratar muchos de los síntomas de la gripe, tales como la tos, la fiebre o dolores en el pecho, y también es útil para combatir el asma. Además, las propiedades antiinflamatorias de esta hierba permiten combatir el dolor de la artitis y otro tipo de dolores musculares.
Usos internos
Anti-diarreico
Para calmar la diarrea debes tomar 1 taza de infusión de milenrama 2 veces al día. Esta dosificación también te servirá para calmar las molestias digestivas.
Sistema circulatorio
Tomar la infusión o el macerado en vino de esta planta ayuda a disminuir la presión arterial, las hemorroides , las venas varicosas, ya que tiene propiedades astringentes y anti-inflamatorias.
Sistema respiratorio
Gracias a sus propiedades bactericidas y depurativas es eficaz en el tratamiento de la bronquitis, la gripe, el asma, alergia y el resfriado.
Sistema digestivo
Disminuye los espasmos intestinales, las flatulencias, indigestión, acidez y estimula el apetito. Puedes mezclarla con infusión de manzanilla para el tratamiento de las úlceras gástricas.
Otros usos
Alivia los síntomas de la menopausia y el síndrome premenstrual; disminuye la depresión, ayuda a mejorar la anorexia estimulando el apetito y previene la pérdida de la memoria.
Usos externos
Puedes utilizar la infusión o cataplasmas para aliviar patologías de la piel como granos, hematomas y eczema; desinfectar heridas, eliminar las grietas en las uñas y eliminar las ojeras.