Si eres mujer, tus posibilidades de contraer una infección en el tracto urinario es alta. Hay que considerar que múltiples expertos hablan de un riesgo tan alto, que se dice que una de cada dos mujeres desarrolla este tipo de infección. Con un riesgo tan elevado, en esta nota analizaremos cosas como cuales son los síntomas de infección urinaria, tratamientos y factores de riesgo.
Hay que considerar que las infecciones urinarias son un motivo fundamental para tener una correcta higiene, después de todo, este tipo de problema se puede generar por cosas tan simple como una mala limpieza tras orinar. Esto es porque la uretra, que es el tubo que se encarga de transportar la orina desde la vejiga hasta el exterior de nuestro cuerpo, se encuentra cerca del ano. En este proceso, las bacterias presentes en el intestino grueso, están en una posición perfecta para escapar del ano e invadir la uretra. Si esto sucede, pueden transportarse hasta la vejiga, generando la infección, la cual al no ser tratada, puede llegar a infectar los riñones. Las mujeres son más propensas a las infecciones urinarias, porque cuentan con uretras más cortas, lo que permite a las bacterias un acceso rápido hasta la vejiga. El tener sexo también puede introducir las bacterias en las vías urinarias.
Síntomas de infección urinaria que debes conocer
Los principales síntomas de infección urinaria son los siguientes; Una sensación de ardor cuando se orina. Este es quizás el síntoma más claro de que se tienen problemas relacionados con este tipo de infección.
La infección urinaria también causa que se deba orinar con más frecuencia, algo que se verá complementado con una orina disminuida, es decir, se ira con más frecuencia a orinar, pero el líquido que saldrá en cada acto, será muy poco.
Otro de los síntomas comunes vinculados con la infección urinaria, es presentar un dolor o presión constante en la zona de la espalda o en la zona inferior del abdomen.
También debemos estar atentos al color de nuestra orina. Mientras que es sumamente común tener un color amarillento cuando se orina, especialmente por las mañanas, cuando se tiene una infección urinaria, el color de la orina será mucho más oscuro, incluso se puede orinar con sangre o esta tendrá un olor demasiado desagradable.
Otro de los síntomas comunes, es el sentir una falta de energía constante, fiebre o escalofríos, en donde estos últimos síntomas, revelan que la infección puede estar afectando a los riñones. Si ese es el caso, se necesitara de un tratamiento médico.
Pruebas y tratamientos recomendados para las infecciones urinarias
Si has experimentado algunos de los síntomas de infección urinaria antes señalado, deberás ir de inmediato al médico. Este nos pedirá someternos a una muestra de orina, la cual será analizada para confirmar la presencia de bacterias que son las causantes de una infección urinaria. ¿El tratamiento? Por lo general se nos darán una serie de antibióticos para matar a las bacterias. Es importante señalar algo de este tratamiento, se deberá mantener por el tiempo que el medico nos diga, después de todo, es muy común que una persona al sentirse mejor, por lo general a mediados del ciclo dentro del tratamiento, deje de consumir los antibióticos, algo que será perjudicial debido a que permitirá que las bacterias vuelvan a aparecer. Para evitar esto, se debe mantener el tratamiento hasta el último dia prescrito por nuestro médico.
Otra de las recomendaciones cuando se tiene este problema, es el beber mucha agua para ayudar a eliminar a las bacterias de nuestro sistema. En caso de que el problema genere mucho dolor, se le debe contar este síntoma al médico, debido a que este nos puede recetar medicamentos para controlar el dolor, sumado a otros implementos como almohadillas especiales para controlar estos síntomas.
También hay que considerar que algunas mujeres se encuentran genéticamente predispuestas a sufrir de infecciones urinarias, mientras que otras cuentan con anormalidades en la estructura de sus vías urinarias, lo que les hace más susceptibles a este infección. Otro caso a considerar, es que las mujeres que sufren de diabetes pueden tener un mayor riesgo de sufrir este problema, esto es porque sus sistemas inmunes debilitados, les hace menos capaces de combatir infecciones de todo tipo. Otras condiciones que aumentan el riesgo son el embarazo, esclerosis múltiple y todo lo que afecta el flujo urinario, tal como los cálculos renales, accidentes cerebrovasculares y lesiones en la médula espinal.