La tendinitis se caracteriza por ser una inflamación de un tendón, la que puede ir acompañada de hinchazón. Esta suele ser una patología crónica que tiene gran porcentaje de reincidencia una vez que aparece en el paciente, provocando dolor y una mayor sensibilidad alrededor de la articulación afectada.
A través del tratamiento de la tendinitis se busca aliviar y reducir el dolor, además de la inflamación en la zona afectada, para esto el reposo de la zona es fundamental pero también se pueden usar algunos remedios caseros para la tendinitis, los que ayudan a que los pacientes enfrenten de mejor manera esta patología y puedan realizar sus actividades diarias con mayor normalidad.
La tendinitis puede aparecer en cualquier estructura de nuestro cuerpo como hombro, muñeca, codo y talón. Donde sus principales causas son alguna infección, golpes o lesiones que afecten el tendón, trabajo excesivo en determinada zona, la edad y enfermedades reumáticas, destacando que la diabetes también puede provocar una tendinitis.
Remedios caseros para la tendinitis y como aliviar el dolor
Los remedios caseros para la tendinitis ayudan a aliviar los principales síntomas de esta enfermedad como el excesivo dolor por la noche e inflamación en la zona afectada.
Compresas de agua fría y caliente
Aunque un médico especialista es el que puede entregar el mejor tratamiento para la tendinitis, también se pueden recurrir a tratamientos naturales como complemento para aliviar los síntomas, un ejemplo de esto es aplicar frío y calor, las bolsas de hielo son muy buenas para reducir la inflación, las que se pueden alternar con calor para mejorar las molestias; también se pueden hacer infusiones de manzanilla y aplicar sobre la zona para reducir la inflamación.
Baños de sal y vinagre
Los baños con sal y vinagre son otros de los remedios naturales para la tendinitis, para esto se calienta agua y se agrega a un recipiente junto a la sal gruesa y el vinagre, se sumerge la zona afectada sobre esta mezcla por 15 a 20 minutos, repitiendo el proceso 3 veces al día.
Romero
Como los pacientes con tendinitis intensifican su dolor y malestar con el movimiento o la realización de alguna actividad, los masajes se transforman en una buena alternativa para mitigar el dolor, el que se puede hacer con alcohol de romero, ya que cuenta con grandes propiedades para desinflamar, actuando también como un cardiotónico, antirreumático y antiséptico.
Para preparar este tónico se necesitan 25 gramos de romero, el que se debe agregar a una botella oscura con cierre hermético, agregando después 250 cc de alcohol etílico, se deja reposar por una semana, para después dar masajes con el tónico sobre la zona afectada.
Sauce
Los remedios caseros para la tendinitis también pueden trabajar de forma interna, como el sauce, el que tiene una función muy parecida a la una aspirina, para esto se agregan 2 gramos de corteza seca de sauce y se agrega a un vaso de agua caliente para preparar una infusión, bebiendo una taza al día; considerando que este remedio no es recomendado para quienes son alérgicos a las aspirinas.
Reposo y cuidado de la zona afectada:
Limitar el movimiento de la zona afectada es crucial para permitir que el tendón se recupere. Evita actividades que agraven el dolor y procura descansar la zona afectada.
Masajes suaves:
Realizar masajes suaves en la zona afectada puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea y reducir la tensión muscular. Utiliza movimientos suaves y circulares con un poco de aceite o crema para masajes.
Compresas de vinagre de sidra de manzana:
El vinagre de sidra de manzana se ha utilizado tradicionalmente por sus propiedades antiinflamatorias. Mezcla partes iguales de agua y vinagre de sidra de manzana, empapa un paño limpio en esta solución y aplícalo sobre la zona dolorida durante unos 20 minutos varias veces al día.
Té de cúrcuma:
La cúrcuma es conocida por sus propiedades antiinflamatorias. Prepara una infusión de té de cúrcuma agregando una cucharadita de cúrcuma en polvo a una taza de agua caliente. Endulza con miel si lo deseas y bebe esta infusión dos veces al día.
Compresas de jengibre:
El jengibre también tiene propiedades antiinflamatorias. Hierve rodajas de jengibre en agua durante unos minutos, deja que la mezcla se enfríe un poco y luego empapa un paño en el líquido para aplicarlo sobre la zona afectada.
Ejercicios suaves de estiramiento:
Una vez que el dolor haya disminuido, realizar ejercicios suaves de estiramiento puede ayudar a mejorar la flexibilidad y fortalecer los músculos alrededor del tendón afectado. Asegúrate de consultar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier rutina de ejercicios.
Diagnóstico y prevención de la tendinitis
El diagnóstico de una tendinitis se realiza a través de un examen físico en la zona afectada, no siendo necesarias pruebas radiológicas, las que solo se piden cuando se busca descartar otras patologías.
Como no curar bien una tendinitis puede provocar graves problemas a largo plazo, es necesario prevenir esta dolorosa patología, esto porque si la inflamación de la tendinitis se prolonga por mucho tiempo puede provocar posibles rupturas y lesiones.
Además si no se sigue el tratamiento del médico especialista, los síntomas pueden reaparecer. Esto explica porque es recomendable realizar un tratamiento complementario con remedios caseros para la tendinitis, los que pueden mejorar notablemente la calidad de vida de los pacientes.
Por eso es recomendable seguir algunas medidas para prevenir esta patología y en el caso de practicar actividades deportivas es importar realizar un calentamiento antes de comenzar con las actividades e mayor impacto.
Además se deben evitar movimientos repetitivos que sobrecarguen el tronco superior e inferior y en el caso de realizar repeticiones en prácticas deportivas se deben tener periodos de descanso.
Por último es conveniente ejercitar todos los grupos musculares para mantener la fortaleza y flexibilidad, sin olvidar que la hidratación también es importante para el buen funcionamiento del organismo.
Ejercicios para tendinitis
Al ser la tendinitis una inflamación de un tendón, el tratamiento puede variar según la ubicación y gravedad de la lesión. Aquí tienes algunos ejercicios generales que pueden ayudar a fortalecer los músculos circundantes y mejorar la flexibilidad, pero siempre es importante consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, especialmente si estás experimentando dolor o ya has sido diagnosticado con tendinitis.
Estiramientos Suaves:
Realiza estiramientos suaves y controlados en el área afectada, manteniendo cada estiramiento durante 15-30 segundos.
Evita estiramientos bruscos que puedan empeorar la inflamación.
Fortalecimiento con Resistencia Baja:
Utiliza bandas de resistencia o pesas ligeras para fortalecer los músculos circundantes.
Ejercicios como elevaciones laterales y flexiones de muñeca pueden ser útiles.
Ejercicios de Rango de Movimiento:
Realiza movimientos controlados para mejorar el rango de movimiento en la articulación afectada.
Gira, flexiona y extiende la articulación dentro de límites cómodos.
Ejercicios de Baja Resistencia con Pelota de Ejercicio:
Realiza ejercicios de bajo impacto con una pelota de ejercicio para fortalecer los músculos sin someter al tendón a demasiada presión.
Ejercicios de Equilibrio:
Mejora el equilibrio y la coordinación con ejercicios simples, como pararte sobre una pierna o hacer ejercicios sobre una superficie inestable.
Ejercicios Acuáticos:
La natación o los ejercicios acuáticos de bajo impacto pueden ser beneficiosos para reducir la carga en las articulaciones.