Estamos de acuerdo en que su sabor es verdaderamente horripilante, por lo que consumirlas, más que un tratamiento curativo, parecería una auténtica hazaña. Pero deberás soportarlas si quieres beneficiarte con las propiedades de las hierbas amargas, porque en verdad, aquellas plantas medicinales que presentan un sabor amargo contienen un conjunto de nutrientes similares, capaces de tratar desde problemas digestivos, hasta reducir el estrés.
¿Cómo repercuten las hierbas amargas en el organismo?
El proceso comienza ni bien el sabor amargo entra en contacto con la lengua, estimulando la producción de saliva mediante las papilas gustativas, lo que a su vez es interpretado por el organismo como el paso previo a la digestión. La secreción de jugos digestivos aumenta y se intensifica la absorción de los nutrientes contenidos en los alimentos.
Debido a esto, es común asociar a las hierbas amargas con la apertura del apetito, y si bien posee esta propiedad, no significa que por el simple hecho de beber una infusión de genciana tendremos más ganas de comer, sino que este efecto se da principalmente sobre las personas con digestiones defectuosas a causa de convalecencias o enfermedades.
Aplicaciones de las hierbas amargas
Desintoxicación y evacuación de residuos
Las hierbas amargas poseen un efecto estimulador de las funciones desintoxicantes del organismo, mediante la dinamización de los procesos metabólicos y facilitando los procesos de evacuado a través del intestino y la vejiga.
Regular el azúcar en la sangre
Como puedes ver, el principal efecto del sabor amargo en el organismo es la estimulación. Para el caso del azúcar en la sangre, presenta un efecto regularizador de la glucemia a través del estímulo que realiza sobre las hormonas responsables de nivelarla: el glucagón y la insulina.
Para el estrés y los estados de ánimo
En estos días prácticamente todo el mundo sufre los efectos del estrés, por lo que si podemos combinar un remedio natural que nos sirva para mejorar la digestión y a su vez para el estrés, sería perfecto.
Y justamente esta es una de las cualidades de las hierbas amargas: lo beneficiosas que resultan para tratar problemas en apariencia disímiles. En este caso, a la par que se estimula el sistema digestivo, también el nervioso recibe señales positivas que permiten revitalizarlo, reduciendo la depresión, la angustia y el estrés, y permitiendo mejorar el estado de ánimo.
Otras aplicaciones
Pero además, las hierbas amargas son buenas para tratar una gran serie de problemas que pueden afectarnos a diario, por lo que resultaría muy útil contar con alguna de estas plantas a mano para cualquier ocasión. Malas digestiones, acumulación de gases, inapetencia, calambres estomacales, síndrome de intestino irritable, anemia y debilidad generalizada, adicción a los dulces o falta de energía son sólo algunos de los problemas posibles de ser atendidos con la consumición de hierbas amargas.
¿Cuáles son las mejores hierbas amargas?
Perfecto, las hierbas amargas son muy útiles para la digestión y muchos problema asociados a esta, pero ¿qué hierba consumir y cómo hacerlo?
Principalmente, las infusiones y decocciones son los métodos indicados para consumir estas hierbas medicinales, que pueden ser desde jengibre, ajenjo o genciana, entre las más intensas, hasta manzanilla, hierbabuena, diente de león o caléndula, entre las más suaves.
Elige la que mejor se adapte a tus necesidades, y comienza a beneficiarte con las grandes propiedades de las hierbas amargas.
No sera posible que si consumimos hiervas amargas para mejorar la absorcion de nutrientes y no comemos nada despues, nos tenga un efecto dañido puesto que de hecho el amargo estimula la produccion de saliva y la liberacion de jugos gastricos?