¿Para que sirve la alfalfa?

Es una planta rica en nutrientes vitaminas y minerales tales como el calcio, hierro, potasio, magnesio, fósforo, zinc, sodio, y vitaminas como la vitamina A, el complejo B (B1, B3, B5, B6, B7, B9, B12), vitamina C, vitamina D, vitamina E, vitamina K, también rico en fitoesteroles, flavonoides, saponinas (muy buenas para atrapar el colesterol), isoflavonas (genisteína), cumarinas (cumestrol), leucina, fenilalanina, triptófano, treonina, isoleucina, metionina, valina y lisina, es muy rica en proteínas vegetales (22% de su peso) , tiene grandes propiedades desintoxicantes

Tabla de Contenidos

Su consumo en la alimentación humana no esta muy difundido a pesar que es un alimento rico en proteínas, fibras, vitaminas y minerales. Además actúa en nuestro cuerpo brindando muchos beneficios para nuestra salud.

La alfalfa sirve como complemento alimenticio en algunas dietas para adelgazar, es una herramienta muy apreciada para solucionar problemas de sobrepeso y debería estar presente en todas las dietas para adelgazar. Las propiedades de la alfalfa en este sentido tienen que ver con su alto contenido de fibra. Esto hace que al ingerirla, cuando llega al estomago, produce una sensación de saciedad ayudando a regular el apetito en caso de ser necesario.

La alfalfa se considera una buena fuente de vitaminas y minerales.Tradicionalmente se emplea en el tratamiento de anemias por deficiencias vitamínicas o minerales, y convalecencias.
Las semillas de alfalfa, así como los brotes, contiente canavanina (aminoácido no protéico), pero que, al parecer, no se encuentra en las plantas maduras. Se ha descrito la aparición de un caso de esplenomegalia con pancitopenia en una mujer de 59 años tras el consumo continuado de semillas de alfalfa germinadas (8-160 g/día durante seis semanas). También se ha observado la reactivación de un lupus eritematoso sistémico en monos, tras ser alimentados con semillas de alfalfa. Ambos efectos secundarios son atribuidos a la canavanina.

Controla el colesterol y Diabetes

En primer lugar es necesario que sepamos lo buena que es su ingesta a la hora de controlar los niveles de colesterol en sangre. Es un alimento que actuará directamente sobre esta variable del cuerpo, facilitando a nuestro organismo un sinfín de beneficios a nivel circulatorio, y es que mejorará enormemente la calidad de la sangre y la salud de las arterias y capilares, mejorando el riego sanguíneo a la vez que mejorará los índices de colesterol beneficioso para el organismo. Las fibras y sustancias que contiene la alfalfa hacen que se peguen al colesterol eliminándolo del torrente sanguíneo y evitando que éste se adhiera a las paredes de los vasos sanguíneos.

Otra propiedad de la alfalfa es su capacidad para bajar el nivel de azúcar en la sangre , con lo cual lo hace muy apto para las personas que sufren diabetes

Alto contenido vitamínico

Otro punto a tener en cuenta es su alto aporte vitamínico y mineral. Entre los minerales que nos aporta descaremos el magnesio, muy importante a la hora de controlar los niveles de glucosa en el organismo. Precisamente esto es lo que hace que se considere la alfalfa como un alimento beneficioso a la hora de controlar los niveles de azúcar en sangre, y es que, a pesar de no estar confirmado, se suele poner como ejemplo de alimento encaminado a conseguir un control efectivo en los niveles de glucosa en sangre. La vitamina K es la que vamos a destacar entre las que nos aporta, ya que ésta nos ayudará a mantener una presión arterial correcta en todo momento.

Proteínas

Casi el 22% de su peso es en proteinas Un punto importante en el que debemos reparar los que practicamos deporte es en el alto aporte de proteínas que nos brinda. Se trata de proteínas de origen vegetal, muy apreciadas a la hora de construir unos músculos fuertes y en perfecto estado. Hay que tener en cuenta que la alfalfa nos aportará una cantidad de proteínas que en muchos casos es superior a la que nos dan algunas carnes. A esto hay que sumarle la pureza de las mismas, pues estás libres de grasas saturadas y apenas contiene calorías que nos afectarán negativamente.

Mejorar la calidad dela sangre

Sus beneficios no se quedan solo ahí, sino que además tiene un papel importante a la hora de mejorar sustancialmente nuestra salud, y es que nos ayudarán a mejorar la coagulación de la sangre y conseguir una respuesta más rápida y eficaz por parte del organismo cuando se trata de hemorragias. Junto a esto, la alfalfa contiene una serie de sustancias que ayudarán a mantener el organismo depurado, hasta el punto de ser un buen alimento a la hora de conseguir fortalecer la salud del hígado y mejorar de este modo su funcionamiento y efectividad.

Debido a estas acciones sobre el organismo el consumo de la planta de alfalfa genera un mejor rendimiento físico y mental, como también una mejora en personas con problemas de insomnio o mal dormir. La mejor manera de utilizar la alfalfa para aprovechar las propiedades depurativas que posee, es mediante el consumo de un cocimiento de las hojas tiernas de alfalfa en agua.

La alfalfa posee propiedades galactógenas, lo cual significa que favorece la producción de leche materna, debido a esta propiedad que posee la mielga, su consumo está totalmente recomendado para mujeres que se encuentren en periodo de lactancia. Además, la planta de mielga es muy útil para combatir los síntomas de la menopausia, esto junto con la propiedad galactógena se deben a su alto contenido de fitoestrógenos.

Por otra parte, la planta de alfalfa, mediante aplicación externa, resulta beneficiosa para el tratamiento de hemorragias. También es considerada como un laxante suave, debido a que favorece la digestión, producto de su alto contenido de fibra.

Sales minerales (10%): calcio (1.750 mg/100 g), hierro (35 mg/100g), potasio (2.000 mg/100g), fósforo (250 mg/100 g), manganeso (5 mg/100 g), sodio (150 mg/100 g), sílice, zinc, etc.
– Vitaminas: Vitamina C (400 mg por 100 g de hojas secas), carotenos (6-7 mg por cada 100 g de hoja seca), vitaminas B1 (4,2 mg/100 g), B2 (17,4/100 g), B3 (58,8 mg/100 g), B6 (7,8 mg/100 g), B12 (trazas), colina (1,85 mg/100 g), ácido fólico (3 mg/100 g), ácido pantoténico (33 mg/100 g), D (1.040 U.I.), E y K.
– Isoflavonas: genisteína, biocanina A, daidzeína, formononetina.
– Derivados cumarínicos: cumestrol, medicagol, sativol, trifoliol, lucernol, dafnoretina.
– Saponósidos, cuyas geninas son derivados del oleaneno: neutros (soyasapogenoles), o ácidos (ácido medicagínico, hederagenina, ácido oleanólico).
– Fitosteroles: beta-sitosterol, alfa-espinasterol, estigmasterol, cicloartenol y campestrol.
– Trazas de alcaloides (en las semillas): trigonelina, estaquidrina, homoestaquidrina.
– Proteínas (16-22%). Enzimas: lipasa, amilasa, pectinasa, emulsina, invertasa y proteasas.
– Fosfolípidos: lecitina (fosfatidil-colina) y cefalina (fosfatidil-etanolamida).
– Taninos.