Las luces y las sombras de los números 1 y 2

Jesus L. Rodriguez

Nosotros al igual que los números, somos a la vez, sombra y luz. Y nuestro gran desafío en la vida es batallar para llegar poco a poco a la liberación de nuestro Ser.

Primero debemos descubrir en nosotros las sombras y ahí tomar conciencia de lo que nos bloquea o limita, entonces ser capaces de enfrentarlo y trabajarlo para vivir de un modo más armonioso. No es fácil, es una lucha cotidiana que nos exige perseverancia, pero tiene sentido transitar por la dificultad para alcanzar la plenitud.

Cuando tenemos nuestra carta numerológica, ahí entonces empezamos a ver los números y cuáles tenemos que trabajar. Cada número tiene su sombra, que se traduce en nuestros miedos, y a la vez el número tiene su luz, que son nuestras posibilidades.

Entonces paso a dejarles las sombras y las luces del número 1:

· de afirmar mi puesto en el aspecto considerado< puedo plantarme sólido como un roble
· de asumir mi ego o mi identidad< puedo aceptarme totalmente en la plenitud de mi ser
· de no estar a la altura de lo que soy realmente< soy capaz de verme como soy en realidad
· de no ser reconocido en el área correspondiente< puedo ser reconocido en todo mi alcance
· de ser “pionero” y lanzarme a nuevos desafíos< puedo guiar a los demás en caminos innovadores
· de no ser capaz de asumir mi autonomía e independencia< me hago cargo de mi propia singularidad
· de no “calzar los zapatos” de mi padre< soy capaz de afirmarme liberándome de la imagen de mi padre.

Las sombras y las luces del número 2:

· de amarme a mí mismo o aceptarme tal como soy< me amo y me recibo, dando gracias por lo que soy
· de no ser amado o de ser abandonado< puedo ser amado sin que me abandonen
· de entregarme confiadamente en una relación duradera< puedo brindarme al otro con confianza y entrega
· de no poder manejar mis propias emociones controlo mis emociones y mi sensibilidad
· de vivir sin el apoyo del otro por falta de confianza propia< soy capaz de confiar en mí sin depender del otro
· de tener que optar y de tomar mis propias iniciativas< puedo elegir sin dificultad, sin dejarme manipular
· de aceptar y vivir mi propia feminidad< disfruto mi potencial femenino
· de cortar el “cordón umbilical”< libero a mi madre en su identidad, recuperando la mía.

Proximamente continuaré con los números siguientes.

Hasta pronto…

“La vida no es una tecnología, ni una ciencia. La vida es un arte, haz de sentirla. Es como el caminar por una cuerda floja.” Osho

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