Perejil, los beneficios de una pequeña planta. Es aromática y pertenece a la familia de las umbelíferas, contiene aminoácidos (lisina), vitamina C y ácido fólico, así como minerales (calcio, fósforo, hierro, zinc y magnesio), ácido nicotínico y fibra.
Es una planta muy usada en la cocina, que abre el apetito y favorece la digestión y ayuda a combatir las flatulencias. Es un excelente diurético, que ayuda en la retención de líquidos, muy adecuada en regimenes de adelgazamiento.
Existe en el mercado jugo de perejil preparado, muy adecuado para estos casos y para tratamientos de afecciones cardíacas y reumáticas -en las que la acumulación de líquidos es muy frecuente-. Gracias a estas propiedades diuréticas, evita la formación de piedras en el riñón.
Al ser depurativo, es un excelente desintoxicante, siendo eficaz en afecciones como urticaria. Es una planta emenágoga, ya que favorece la menstruación y alivia los dolores ocasionados por ésta.
El jugo de perejil es además un excelente colirio ocular, alivia los ojos cansados e irritados, aplicando un poco de jugo sobre ellos, así como previene las hemorragias nasales y el jugo de perejil en el agua de baño, resulta un excelente relajante.
Un poco de jugo de perejil aplicado sobre los pechos de las madres lactantes es considerado un buen galactófugo, ya que detiene el exceso de producción de leche.
Perejil para la digestión y tránsito intestinal
El perejil es considerado como una planta digestiva, que ayuda a la hora de hacer mejor la digestión, previniendo o aliviando los espasmos intestinales y los síntomas tan molestos causados por las digestiones lentas.
Además de estas cualidades digestivas, por su contenido en fibra se convierte en una opción natural interesante a la hora de regularizar el tránsito intestinal.
Para disfrutar de estos beneficios se recomienda tomar una taza de infusión de perejil antes de las 3 comidas principales.
Perejil para el sistema inmunológico
Si buscas reforzar el sistema inmunológico y aumentar las defensas de forma completamente natural, no hay duda que encontrarás en el perejil a un gran aliado. Y es que el perejil es muy rico en vitamina C, un nutriente esencial con reconocida acción sobre nuestro sistema inmune.
Por otra parte, por su contenido en esta vitamina también es ideal aumentar su consumo en épocas como el otoño o el invierno, por ejemplo con la preparación de caldos y sopas, gracias a sus cualidades frente a la gripe y los resfriados (que si bien es cierto que no nos ayuda a evitarlos, sí es útil para aliviar sus síntomas y acortar su duración).
Perejil para los riñones
El perejil es ideal para limpiar los riñones, de manera que nos encontramos ante un excelente alimento para depurar los riñones de forma completamente natural. El motivo es que sus propiedades diuréticas favorecen que el perejil estimule la función renal, de forma que ayudamos a que nuestros riñones realicen mejor sus funciones de depuración y desintoxicación del organismo.
También ayuda en caso de hipertensión arterial, al ayudar a regular los niveles altos de presión arterial.
Aunque el perejil sea bueno para los riñones no se aconseja su consumo en caso de piedras del riñón o en personas con tendencia a cálculos renales, ya que contiene gran cantidad de ácido oxálico (un componente implicado en su formación). Tampoco en caso de insuficiencia renal.
Perejil para la anemia, fatiga y cansancio
Aunque esta cualidad no es del todo conocida, ¿sabías que el perejil es ideal para personas con anemia, fatiga y cansancio físico? La respuesta a este beneficio lo encontramos en su riqueza en minerales, al aportar interesantes cantidades de hierro, fósforo y calcio.