Gonorrea, enfermedad de transmisión sexual. La gonorrea es una enfermedad de transmisión sexual originada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae, la que una vez que ingresa en el cuerpo coloniza el cuello uterino, el útero, las trompas de Falopio y la uretra en hombres y mujeres.
Por otra parte es un organismo que puede crecer en boca, garganta, ojos y ano. Se contagia mediante las relaciones sexuales vaginales, anales u orales sin protección, y además las madres infectadas pueden contagiar al bebé durante el parto.
En cuanto a los síntomas, en el hombre pueden no aparecer, aunque en otros casos pueden notar entre los dos a 30 días del contagio ardor al orinar, secreciones blancas, amarillentas o verdosas en el pene, dolor en los testículos o inflamación testicular.
En el caso de las mujeres es más grave porque la mayoría no tiene síntomas o bien son tan leves que pasan desapercibidos o se confunden con una infección vaginal. Las molestias que pueden notar las féminas son ardor o dolor al orinar, mayor cantidad de flujo vaginal y hemorragias entre periodos menstruales. En la mujer las complicaciones de la gonorrea son severas, hasta puede causar infertilidad.
Cuando la infección de gonorrea se localiza en el ano, los síntomas son secreciones anormales, dolor, picazón y sangrado, aunque también puede que no haya molestia alguna. En el caso de la infección en la garganta suele aparecer dolor, pero en raras ocasiones.
¿Cómo puede prevenirse la gonorrea?
La manera más segura de evitar el contagio de enfermedades de transmisión sexual es absteniéndose del contacto sexual o tener una relación estable y mutuamente monógama con una pareja que se haya hecho las pruebas y que se sepa que no esté infectada.
Los condones de látex, cuando se usan de manera habitual y correcta, pueden reducir el riesgo de transmisión de la gonorrea.
Todo síntoma genital, como por ejemplo secreción o ardor al orinar, una úlcera poco usual o una irritación, debe ser razón para dejar de tener relaciones sexuales y consultar de inmediato a un proveedor de atención médica. Una persona a la que se le ha diagnosticado y se le ha tratado la gonorrea debe informar de esto a todas sus parejas sexuales recientes para que vean a un proveedor de atención médica y reciban tratamiento. Esto reducirá el riesgo de que las parejas sexuales presenten complicaciones graves por la gonorrea y también disminuirá el riesgo de reinfección en una persona. La persona con gonorrea y todas sus parejas sexuales deben evitar tener relaciones sexuales hasta que hayan completado su tratamiento contra la enfermedad.
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