Que el sexo masculino empiezan a estar tan preocupado por su aspecto como el femenino no es ya nada nuevo, porque, al fin y al cabo, el tiempo pasa para todos. Por eso, si quieres salirte del regalo típico para tu padre o para el padre de tus hijos, y pasar de la corbata o la colonia, este año sorpréndele con un tratamiento de belleza. Y a lo mejor, cuando vuelva a casa, quien abre la puerta es Brad Pitt, que por cierto, de ser padre, sabe bastante, y de primeras arrugas, también.
Biojet Supersonic es un tratamiento facial perfecto para el sexo masculino porque, es totalmente indoloro, y no vamos a engañarnos, los hombres aguantan el dolor mucho peor que las mujeres y tienden a rechazar cualquier protocolo que les pueda resultar molesto. Sus resultados son similares a la mesoterapia pero sin los desagradables pinchazos.
Es un tratamiento para aquellos que padecen foliculitis, que quieren difuminar pequeñas arrugas, descongestionar y drenar la delicada zona del contorno de ojos o combatir el acné. El protagonista: un chorro supersónico, pero calma, que nadie va a salir disparado.
Biojet Supersonic es un novedoso aparato que salva el obstáculo que representa la epidermis gracias al chorro supersónico de oxígeno a alta velocidad (220 metros por segundo), lo que permite que se produzca una mayor penetración de los activos.
El chorro supersónico está constituido por miles de microgotas, que, lanzadas sobre la piel a alta velocidad, producen dos efectos fisiológicos importantes: que los principios activos, adaptados a cada cliente, penetren a nivel muy profundo y que la piel quede perfectamente exfoliada, gracias a la presión del chorro se consigue una exfoliación rápida y eficaz, un delicado y seguro peeling natural.
Una de las cosas más interesantes de este sistema es que el equipo permite fotografiar las zonas tratadas antes y después del protocolo para poder ver los resultados, y aseguran que la diferencia es notable.
Los activos que se introducen en la piel dependen de las necesidades de cada cutis. Células madre de las plantas y ácido hialurónico para tratar las pieles más secas; azufre orgánico para combatir el acné y como tratamiento para las pieles más grasas; o Vitamina A y retinol en el protocolo antienvejecimiento.
Es un sistema igualmente de efectivo para las mujeres, pero resulta especialmente indicado para los hombres porque no tiene el inconveniente de las microcorrientes: los pelos de la barba se convierten en conductores de electricidad y otros tratamientos les producen pequeños calambres.
Cada sesión dura 70 minutos y se recomiendan 6 sesiones, una por semana.
Dónde: en los centros Carmen Navarro de Madrid (calle Sagasta 21, Buen Suceso 8 y Ortega y Gasset 23) y Sevilla (Rosario 4).
Precio: 120 euros por sesión.